MADID (EP). A&G Banca Privada cree que las bolsas mundiales representan la mejor oportunidad de inversión para el próximo año, cuando la cotización podría subir un 10% si continúa esta fase de optimismo bursátil previa al crecimiento en el nuevo ciclo económico tras la crisis del Covid-19, con una tercera ola de contagios "bastante improbable".
"Esta es la fase en que más dinero se gana en la bolsa", ha sostenido el director general de inversiones de A&G, Diego Fernández Elices, este lunes. Anticipa que en 2021, los beneficios empresariales suban un 20%, las Bolsas se "abaraten" en términos de ratio precio-beneficio (PER) un 10%, pero aún así, suban un 10%. El experto considera que si se produce alguna corrección en la Bolsa mundial a los niveles actuales, esta debe verse como oportunidades de compra y no de venta de las acciones. Por ello, ha señalado que aún no hay que consumir "el 100% del presupuesto" para el riesgo.
De cara al próximo ciclo económico, A&G sostiene que hay que sobreponderar la renta variable sobre la renta fija en general. Para una composición tradicional, conocida como la frontera eficiente, con un 40% de inversión en renta fija y el 60% en variable, su pronóstico es que la cartera gane una media del 4% en 2021, frente al 9% anual histórico.
En su apuesta de inversión, no hay una apuesta sectorial clara, en tanto que cree que las firmas que mejor lo han hecho en bolsa este año, las grandes tecnológicas de Estados Unidos, seguirán mejorando sus resultados, pero podría ir menos bien en su cotización. "No hay que vender todo ya, pero sí ir diversificando la inversión en renta variable", ha apostillado Fernández. En este sentido, ve atractivo en el sector industrial y confía en que otros sectores que puedan cambiar su negocio por la tecnología, pero que no cotizan ahora a un múltiplo exagerado sean más atractivos. Considera que tras la crisis hay "más activos invertibles" y que poco a poco se deben rotar cíclicamente las carteras para incluir 'value'.
España no está entre sus regiones favoritas para invertir, aunque Fernández ha reconocido que han operado de forma "táctica" con acciones de hoteles y en renta fija con subordinados en firmas financieras españolas este año. Además, han comprado algunas posiciones en el sector industrial, suponiendo que el mercado automovilístico puede mejorar.
En cuanto su estrategia en renta fija, el banco privado ve más atractivo en el crédito que en los bonos soberanos y cree que es "un activo susceptible de ser vendido en cualquier momento". En los bonos de países prefieren a Italia que España. "Comprar un bono alemán y esperar al vencimiento implica una pérdida del 0,5%. Por eso, las oportunidades en renta fija ahora no son eso, si no la gestión activa", ha señalado Germán García Mellado, gestor de renta fija de A&G Banca Privada.
Además, le gustan los bonos ligados a la inflación y la deuda subordinada corporativa, en tanto que ve que el riesgo de subordinación "está más que pagado" en determinados ratios. "El universo de inversión es muy amplio, hay que acertar en la tipología de deuda", ha apostillado García Mellado.
La firma ve valor en emisores de deuda de sectores penalizados por el Covid-19 como automóvil, turismo o inmobiliario, aunque cree necesario ir "nombre por nombre" teniendo en cuenta el colchón de liquidez y los ingresos de caja de cada compañía. Por ahora, no ve mucho atractivo en los bonos verdes o sostenibles.
En su estrategia, la firma considera que hay que olvidarse de las carteras de inversión que solo tenga renta fija y variable, ya que deben combinarse con activos alternativos, como oro o activos ilíquidos como las infraestructuras o el 'direct lending'. Así, para una cartera conservadora, que pueda admitir la iliquidez, recomiendan a sus clientes hasta un 25% de la inversión en alternativos, a costa de reducir la renta fija. Para los perfiles más agresivos también recomiendan acceder a tecnológicas a través de 'venture capital' y 'private equity'.