VALÈNCIA. El área industrial Pla de Carrases UE-B (Llíria) culmina su urbanización con la construcción y arranque del depósito de agua. Una obra que supone el punto final a un importante desarrollo logístico en Valencia, que ocupa una superficie de cerca de 1.200.000 metros cuadrados, de los cuales más de 700.000 son de parcela edificable y 157.000 metros cuadrados de zonas verdes.
Esta actuación, con una inversión de más de 100 millones de euros, ha sido impulsada por el agente urbanizador Lliria Actuaciones Integrales participada por Yaiza Trust y Grupo Bertolín, este último, además, constructor de todas las obras. Este enclave cuenta ya con un 45% de ocupación, con grandes empresas instaladas en su suelo como Power Electronics, Pinturas Montó, AOM (Advanced Organic Materials) o Conforama. Con la progresiva llegada de nuevas industrias, el polígono generará un total de 10.000 empleos. De hecho, empresas del sector logístico e industrial ya se han interesado por el suelo disponible.
Por su ubicación estratégica a los puertos de València y Sagunto, servicios de última generación, disponibilidad de grandes pastillas de terreno y su cercanía a la ciudad de València, esta área industrial se ha convertido en un agente dinamizador en la Comunitat Valenciana y un importante polo de generación de empleo en la comarca.
Así se ha podido constatar en el acto celebrado este lunes durante el cual se ha dado por finalizada la obra. La visita ha contado con la presencia del presidente de la Generalitat Valenciana, Ximo Puig; el alcalde de Llíria, Manolo Civera; la directora general corporativa de Grupo Bertolín, María Bertolín, y el CEO de Yaiza Trust, Juan Boluda.
María Bertolín ha puesto en valor la envergadura de la actuación manifestando la importancia estratégica que supone para la zona contar un desarrollo industrial como Pla de Carrases ya que "actualmente, es difícil encontrar otra con características similares". Y es que en Pla de Carrases confluyen dos factores que determinan su singularidad. Por un lado, la localización estratégica junto a una vía como la CV-35, la proximidad al by pass y a los puertos de Sagunto y València.
Por otro lado, frente a otros parques industriales que sólo tienen dotaciones para empresas del sector logístico, en este caso los servicios de potencia eléctrica, agua y depuración de aguas residuales, permiten también que se implanten industrias con mayores consumos de electricidad y agua. Así, la dotación eléctrica del polígono es de 27 Mw y cuenta con una concesión de aprovechamiento de agua de 524.000 m3/año.
El polígono cuenta también con una estación depuradora de aguas residuales dotada de la última tecnología (SBR) que lo convierte es un espacio muy atractivo para la implantación de industrias cuya reglamentación precise de esta característica.
Antonio Piles, director general de Desarrollo de Negocio de Grupo Bertolín, ha asegurado que para los operadores actuales, "fue determinante el hecho de disponer de pastillas de terreno de gran tamaño y este polígono fue pionero en eso". Según explica, las grandes empresas ya instaladas "han primado las excelentes conexiones, las parcelas amplias y la dotación de servicios para decidir su ubicación".
Piles ha señalado que actualmente en la Comunitat Valenciana existe una gran necesidad de suelo logístico y generarlo tiene muchas dificultades por la dilatación de los plazos. "Por eso es tan interesante que exista una infraestructura con servicios de última generación que ya esté construida y en la que grandes empresas pueden venir a instalarse", ha destacado.
También ha puesto en valor que este polígono de última generación es un buen ejemplo de cómo la colaboración público-privada es clave para arrancar y hacer avanzar obras de gran envergadura. "En el caso de Pla de Carrases la obra se ha dilatado porque su inició prácticamente coincidió con la anterior etapa de crisis económica y también debido a las distintas cuestiones de índole técnica que han surgido y se han tenido que ir solucionando", ha apuntado.
Junto con Pla de Carrases, Grupo Bertolín ha desarrollado otras dos zonas Industrial/logísticas de gran envergadura y con servicios de última generación como son el Parque Empresarial Circuito de Cheste (Valencia) y la Plataforma Central Iberum en Illescas (Toledo), y actualmente está conceptualizando otros desarrollos Industrial/logísticos similares en la Comunitat Valenciana.
