Foto: MARGA FERRERVALÈNCIA. En la ciudad de València hay ahora mismo 14 viviendas públicas ocupadas ilegalmente, 12 de las cuales se encuentran ubicadas en el barrio del Cabanyal. Y es precisamente dentro de este grupo donde figuran los 10 inmuebles con una situación más compleja: aquellos que llevan "años" ocupados sin que se haya podido determinar una fecha o motivo de la usurpación, al tiempo que tampoco se ha podido identificar a las personas que hay viviendo en el interior, lo que dificulta de manera muy considerable las labores de recuperación por parte de la administración local.
Todo ello, teniendo en cuenta que se trata de viviendas públicas que, en otras circunstancias, el Ayuntamiento podría estar dedicando a la vivienda social o en su defecto al alquiler asequible. Pero que, por las circunstancias que presentan, se encuentran en barbecho y por lo tanto inutilizables. Estos son los datos que maneja, al menos hasta la fecha, el consistorio con respecto a la materia.
Así, del listado también se desprende que las otras dos viviendas restantes en el barrio del Cabanyal sí que han visto iniciados los procesos de recuperación: a ambas se les ha notificado la primera audiencia para proceder al desalojo del inmueble, aunque por el momento no hay más noticias sobre el desarrollo de las actuaciones y su consecuente recuperación por parte del consistorio.
Finalmente, las últimas dos viviendas públicas ocupadas ilegalmente se encuentran distribuidas entre los barrios de Campanar y Nou Moles. A la primera de ellas ya se le tramitó el expediente e incluso se envió una orden de desalojo. Sin embargo, el inmueble todavía figura como ocupado a día de hoy, al menos según se desprende de los datos que maneja el Ayuntamiento.
Y, por lo que respecta a la de Nou Moles, esta ha sido ocupada por familiares de la antigua arrendataria, que ya han sido debidamente identificados por las administraciones públicas. De hecho, se les ha iniciado el expediente de recuperación de oficio, aunque por el momento todavía se encuentra dentro del periodo de alegaciones.
Esta información ha sido aportada por el consistorio a preguntas planteadas por el Partido Popular, que ha criticado duramente la situación de ocupación de las viviendas: "Es una vergüenza que el gobierno se olvide de la vivienda social en uno de los momentos de mayor escalada de la demanda", denunciaban al respecto. Asimismo, también lamentaban que el Ayuntamiento "dé por perdidas" las 10 viviendas del Cabanyal que todavía no han iniciado procesos de recuperación por falta de datos. "Es necesario que se pongan al día para dar respuesta a las necesidades de los valencianos de una vez", concluían.
Lo cierto es que a lo largo de los últimos años, y especialmente a raíz de la pandemia, ha crecido considerablemente el número de demandantes de vivienda pública. A este respecto, ahora mismo hay más de 2.200 familias acumuladas en lista de espera, de las cuales unas 700 se apuntaron durante el 2021. A este respecto, los populares criticaban la insuficiencia del parque público para poder dar cabida a todas las peticiones que recibe el consistorio. Una situación que, según ellos, agrava todavía más el hecho de que existan viviendas inutilizables por ocupación.
Sea como sea, y tal y como explicó en su momento la concejala de Vivienda, Isa Lozano, ahora mismo València atiende a 130 familias en régimen de vivienda social y otras 29 en alquiler asequible. Precisamente, esta última modalidad era la que iba a recibir un especial impulso durante la presente legislatura, con la proyección de diversos edificios que a la postre tendrían que dar lugar a más de 300 inmuebles.
Sin embargo, el momento, tan solo se ha acabado la ejecución de seis de ellos, y el resto siguen en proceso. Recientemente, se conocía la noticia de que el Ayuntamiento ya había adjudicado la construcción de otros ocho pisos en el barrio del Carmen, mientras que los grandes proyectos de más de 50 viviendas han recibido licencia, pero todavía habrá que esperar para verlos materializados.
