VALÈNCIA (EFE). El déficit de la Comunitat Valenciana ascendió a 1.158 millones de euros en septiembre, lo que supone el 1 % del PIB, por encima del registrado en agosto.
Según los datos publicados este jueves por el Ministerio de Hacienda, los ingresos sumaron 12.971 millones y los gastos acumularon 14.129 millones en septiembre, lo que arroja el resultado negativo.
En el conjunto nacional, el Estado acumuló en los diez primeros meses del año un déficit de 6.303 millones de euros, una cifra un 20,7 % inferior a la del mismo periodo de 2018 y que equivale al 0,5 % del PIB.
Esta reducción del déficit se obtiene después de que los ingresos hayan crecido más que los gastos, un 2,5 % y un 1,4 %, respectivamente.
En términos primarios -es decir, sin tener en cuenta el coste de los intereses de la deuda- el Estado cerró octubre con un superávit de 14.374 millones, un 5,5 % superior al de estas mismas fechas de 2018 y equivalente al 1,15 % del PIB.
Hacienda también ha publicado la ejecución presupuestaria del conjunto de las administraciones públicas -salvo las corporaciones locales, cuyos datos aún no se conocen- hasta septiembre, que cerró con un déficit de 20.957 millones, un 1,68 % del PIB y un 14,6 % más que en el mismo periodo de 2018.
En los nueve primeros meses del año, la administración central tuvo un déficit del 0,85 % del PIB; los fondos de la Seguridad Social, del 0,54 % del PIB, y las comunidades autónomas, del 0,29 % del PIB.
El déficit de las comunidades, que en 2018 tenían superávit, está afectado por el efecto negativo de la liquidación definitiva del sistema de financiación de 2017, cuando la modificación del sistema de gestión del IVA restó a la recaudación de este impuesto los fondos equivalentes a un mes.
Cuatro comunidades autónomas cerraron septiembre con superávit: Baleares, Canarias, Navarra y el País Vasco.
Por lo que se refiere a la ejecución presupuestaria del Estado y con datos hasta octubre, los ingresos sumaron 172.099 millones de euros en estos diez meses, un 2,5 % más.
Los ingresos por impuestos y cotizaciones sociales se situaron en 151.742 millones, un 1,7 % más, gracias al buen comportamiento del IRPF -recauda 33.251 millones, un 11,2 % más, por las mayores retenciones del trabajo y la buena marcha de la campaña de la renta- y el IVA -ingresa 62.118 millones, un 2,4 % más-.
En cambio, el impuesto de sociedades redujo su recaudación en 2.232 millones ante la devolución de actas a una sociedad y el efecto de la traslación a contabilidad nacional del segundo pago fraccionado.
El Estado recibió en los diez primeros meses del año 11.751 millones de transferencias de otras administraciones, un 13,8 % más.
Los gastos del Estado crecieron en entre enero y octubre un 1,4 %, hasta los 178.402 millones, ante el aumento de la aportación a la Unión Europea por recursos de IVA y RNB (12,1 %) y prestaciones sociales (10,3 %).
Además, aumentó el gasto en consumos intermedios en un 10,5 % por los gastos electorales y el de remuneración de asalariados en un 4,4 % por la mejora retributiva y la equiparación salarial de la policía y guardia civil con los cuerpos autonómicos.
En cambio, el gasto en intereses de la deuda bajó un 4,2 %, a 20.677 millones, y el destinado a inversión, un 5,3 %, hasta 3.855 millones.