Los mercados de todo el mundo adoptan una visión más agresiva ante las tensiones comerciales, lo que se traduce en un aumento del apetito por el riesgo
MADRID. Los mercados de todo el mundo decidieron adoptar una visión más agresiva ante la amenaza de una 'guerra comercial' entre los principales socios comerciales. Las acciones subieron en todo el mundo y, sin embargo, los rendimientos de EE UU retrocedieron ligeramente. La combinación de menores rendimientos en Estados Unidos y un mayor apetito por el riego impulsaron el rally de cada divisa principal frente al dólar estadounidense.
La moneda con mejor rendimiento fue el peso mexicano, con una subida del 6% debido a que los mercados vendieron con el rumor y compraron con la noticia de la victoria electoral de la izquierda mexicana en las elecciones del domingo pasado.
Todos los ojos ahora están puestos en el informe de inflación de junio en EE UU que se conocerá el jueves. El aumento salarial, más bajo de lo esperado del informe de nóminas de junio, significa que las posibilidades de un fallo ante las expectativas probablemente hayan aumentado. El lanzamiento del acta de la última reunión del Consejo del BCE, que también se publicará el jueves, será el otro evento importante de la semana.
Una semana lenta en la Eurozona que vio sorpresas positivas en los pedidos de fábrica y la producción industrial en Alemania. Estos datos confirman, adicionalmente, que la desaceleración en la actividad de la zona euro antes del verano fue un bache en lugar de un cambio de tendencia. Las actas del BCE el jueves aclararán algo sobre el cronograma previsto para las siguientes subidas de tipos. Los mercados esperan una primera alza en septiembre de 2019, no obstante, estamos empezando a pensar que puede llegar un poco antes.
Las noticias positivas provenientes de los índices de actividad empresarial PMI así como un mensaje optimista de Carney fueron pasados por alto por los mercados, que continúan centrándose en la falta de progreso en las conversaciones sobre el Brexit. La libra se movió con el euro frente al dólar, logrando un muy buen rendimiento de más del 1% durante la semana. Este martes conoceremos los datos de producción industrial y de fabricación que podrían respaldar la libra si se confirma la fuerte racha en los datos económicos de Reino Unido.
El informe de nóminas de junio fue mixto. La cifra general de creación de empleo fue más fuerte de lo esperado, en 213,000 versus el consenso de 195,000. Vale la pena agregar que la lectura de mayo también fue revisada al alza. El desempleo, sin embargo, registró un sorpresivo aumento al pasar del 3,8% en mayo al 4,0% en junio, pero esto fue debido completamente a la reinserción en la fuerza laboral de más trabajadores con esperanzas de obtener un puesto. El crecimiento salarial se desaceleró del 0,3% al 0,2% mensual y aumentó un 2,7% en comparación al año anterior, que ahora es ligeramente inferior a la inflación por primera vez en muchos años. Después de esto, otra decepción en los datos de IPC del jueves podría llevar a los mercados a revisar su visión de las futuras alzas de la Fed lo que agregaría combustible a la reciente ola vendedora de dólares.
Enrique Díaz-Álvarez es director de Riesgos de Ebury