VALÈNCIA. El juez de instrucción que investiga el conocido como caso Taula ha archivado la parte de la investigación que afecta al contrato del centro La Rambleta, tal y como avanzó Valencia Plaza.
El archivo afecta al empresario de la comunicación José Adolfo Vedri, quién fue imputado a raíz de una grabación entre el exgerente de Imelsa, Marcos Benavent, y la exconcejal de Cultura María José Alcón en la que se podía escuchar como decían: "La Rambleta está a punto de caramelo".
Es un audio de solo 16 segundos que abrió una de las vías de investigación más complejas de la causa, dirigida a conocer si dicha adjudicación había sido amañada y si se habían producido mordidas.
Sin embargo, cuando Benavent declaró dejó claro que no había "ninguna irregularidad en el contrato", algo que vino refrendado por un informe pericial.
La adjudicación, y posterior construcción y explotación de La Rambleta se investigaba dentro de la pieza separada de la Operación Taula que versa sobre las posibles irregularidades en varios contratos del Consistorio cuando María José Alcón era concejala de Cultura.
Junto a Alcón y Benavent, en esta pieza también permanecía como investigado José Adolfo Vedri. Fuentes cercanas a Vedri explicaron en su día que no estaba nervioso "porque La Rambleta está limpia como una patena. No hubo ningún tipo de irregularidad y así quedará demostrado".