VALÈNCIA (EP) El Tribunal de Cuentas ha detectado un total de 21 contratos menores en 2016 (el 23,03% de los examinados) en los que se adjudicó de forma separada el desarrollo de acciones de carácter necesario, reiterado y previsible, o prestaciones de naturaleza similar que podían responder a un único fin, advirtiendo de este modo de un posible fraccionamiento que podría evitarse con una planificación "más racional de las necesidades" que permitiría una contratación única por un importe global.
Así consta en el informe sobre la adjudicación de contratos menores por parte de los seis grandes ayuntamientos (más de 500.000 habitantes) en 2016: Barcelona, Madrid, Málaga, Sevilla, València y Zaragoza. Es la primera vez que se fiscaliza este tipo de contratación y en general, el Tribunal concluye que estos consistorios cumplen la normativa vigente.
El documento concluye que los consistorios siguen fraccionando contratos para reducir el coste de cada uno de ellos, adjudicarlos de forma directa y evitar la tramitación de un concurso público, con Barcelona a la cabeza: el 36,82 por ciento del total de contratos menores siguió este procedimiento en 2016.
Los contratos menores son aquellos de importe inferior a 50.000 euros en el caso de obras o de 18.000 euros para el resto de asuntos (sin contar el IVA) que pueden adjudicarse directamente sin necesidad de publicar un concurso y de que se presenten varias propuestas.
Esta peculiaridad introduce el riesgo, explica el Tribunal de Cuentas, de que se realicen "fraccionamientos indebidos" de contratos mayores para "eludir" los requisitos de adjudicación. Dicho esto, el informe añade en la mayor parte de los casos se debe a una "defectuosa planificación".
Es lo que ocurrió en 2016. Barcelona fragmentó el 36,82% de los contratos menores examinados; Madrid, el 12,6%; Málaga, el 23,91%; Sevilla, el 13,33%; València, el 23,08%; y Zaragoza, el 25%. Las cuantías adjudicadas son menores.
En el caso del 'cap i casal', explica el caso de dos contratos adjudicados en dos meses a la misma empresa, sin que conste que se solicitaran otras ofertas, para el suministro de material electro-lumínico y de imagen y sonido para el Teatro El Musical. Se trata de "prestaciones de naturaleza similar" con un valor conjunto de 22.080 euros que, de no haberse fraccionado su objeto, habría exigido un contrato negociado sin publicidad.
También alude a dos contratos para la realización de trabajos en el Colegio Público Municipal Benimaclet, relativos a reformas en instalaciones y equipamiento exterior, adjudicados en fechas próximas a favor de una misma empresa sin que se promoviera concurrencia, por un importe acumulado de 69.826 euros. "Se fraccionó la contratación de las obras para permitir su adjudicación directa mediante dos contratos menores diferentes, eludiendo la aplicación del procedimiento de adjudicación legalmente previsto", apunta el Tribunal de Cuentas.
Ocho contratos relacionados con cursos de valenciano para el personal del consistorio también son objeto de análisis, ya que se adjudicaron en la misma fecha a favor de tres adjudicatarios distintos con un importe total de 22.800 euros y sin concurrencia de ofertas. En 2017 se celebraron 17 contratos con el mismo objeto.
"En lugar de utilizar la figura de la contratación menor debería haber planificado correctamente los cursos de valenciano, acudiendo a los procedimientos ordinarios de preparación y adjudicación de los contratos", agrega el órgano fiscalizador.
Entre otros, se refiere a dos contratos para la limpieza de canales de l'Albufera (por un total de 35.121 euros) tramitados simultáneamente y adjudicados sin concurrencia a dos empresas. En 2017 se adjudicaron otros dos nuevos contratos. Así, incide en que se trata de necesidades reiteradas y "perfectamente previsibles" que podrían ser objeto de contratación conjunta, como así se hizo en agosto de 2018.
Según los datos revisados por el Tribunal de Cuentas, el 96,80% de los contratos del Ayuntamiento de València en el ejercicio se adjudicaron a través de este procedimiento (2.448 del total de 2.529). Desde el punto de vista del importe, la contratación menor representa un 20,34% del importe total (14,5 millones de euros frente al importe total de adjudicación de 71,6 millones).
En el informe se destaca que dos de los contratos menores celebrados por el consistorio en 2016 superaron, aunque por un importe mínimo de un céntimo, el límite establecido legalmente. Se trata de los relativos a la participación en el Congreso Nacional de Medio Ambiente y al suministro de una licencia Bismart de Gobierno electrónico, adjudicados por 18.000 euros, IVA excluido.
Respecto a este último, el Tribunal de Cuentas detectó que en la primera relación remitida por el consistorio figuraba por 18.000 euros, como consta en la resolución y factura, mientras en la última remisión de información constaba un importe de 17.999,99 euros.
Precisamente este órgano advierte de las discrepancias en torno a la información facilitada, dado que en octubre de 2017 se incluyeron 1.578 expedientes de contratos menores por 7,1 millones de euros y en enero de 2018 se remitieron nuevos datos, de los que resultaban 2.690 expedientes por 15,1 millones.
"La información remitida por el Ayuntamiento presentaba claras deficiencias, entre ellas en 190 expedientes no figuraba el importe del contrato, en otras ocasiones no figuraba el NIF del adjudicatario o este era erróneo", subraya el texto.
A la vista de esa segunda relación de contratos menores se seleccionó una muestra de 102 para su examen y al solicitar los expedientes los servicios municipales informaron que cinco de los contratos solicitados se habían identificado por error como contratos menores derivados de acuerdos marco cuando eran independientes. Se cotejó la información con la del Portal de Transparencia y "ante la magnitud de las discrepancias" se pidió una aclaración al Ayuntamiento, que informó de la cifra final de contratos menores.
Las incidencias "ponen de manifiesto carencias significativas en los sistemas internos de registro de la actividad contractual, que han afectado a la fiabilidad de la información facilitada", agrega el informe, que insiste en que el Ayuntamiento de València "ha ido variando sustancialmente la información facilitada".
Además de esas carencias, el Tribunal de Cuentas advierte de deficiencias en la modificación irregular de un contrato para la restauración del refugio antiaéreo del ayuntamiento, con un incremento del 26% respecto al precio de adjudicación; así como de ausencia de certificaciones de obra; defectos formales en las facturas de tres contratos; facturas de fecha anterior a la aprobación del gasto en tres y ausencia de certificaciones en todos los meses de obras en once contratos.
El Tribunal de Cuentas señala en sus conclusiones que en general estos seis municipios cumplieron en 2016 la normativa sobre contratación menor, pero también hubo fallos y realiza por tanto varias recomendaciones.
Les pide que planifiquen bien sus actividades para no fragmentar contratos sobre asuntos previsibles, reiterados, prolongados en el tiempo, o actuaciones de naturaleza similar. También recomienda que aunque no sea una obligación legal establezcan en sus normas internas la promoción de la concurrencia también en los contratos menores mediante anuncios o pidiendo propuestas a un mínimo siempre de tres empresas.