VALÈNCIA (EFE). La Confederación Empresarial de la Comunitat Valenciana (CEV), el Instituto Valenciano de la Empresa Familiar (IVEFA), y la Asociación de Empresas Familiar de la Provincia de Alicante (AEFA) han mostrado su "preocupación" por el "retraso" en la bajada del Impuesto de Sucesiones para empresas familiares.
Así lo han manifestado este martes sobre la ampliación de la bonificación del 95 al 99 % del impuesto de Sucesiones para todas las empresas familiares, con independencia de su facturación.
Al respecto, las tres organizaciones han denunciado, en un comunicado conjunto, que la reducción actual del 95 % multiplica por cinco los costes de transacción que soportan las empresas de la Comunitat Valenciana respecto a las transmisiones realizadas en otras comunidades autónomas.
En este sentido, se han referido a comunidades como Andalucía, Aragón o Galicia, que han elevado al 99 % el porcentaje de reducción en la base imponible, lo que han considerado una "merma en la competitividad" de los empresarios valencianos.
CEV, IVEFA y AEFA han afirmado que la ampliación de esta bonificación contribuirá a garantizar la subsistencia de un tipo de empresas que en la Comunitat representa el 91 % del tejido empresarial y genera el 85 % del empleo.
“Proteger y fomentar su continuidad generará riqueza económica en nuestro territorio, todos los partidos políticos deberían apoyar la reducción del impuesto”, ha asegurado el presidente de la CEV, Salvador Navarro.
Por su parte, el presidente de IEVFA, Francisco Vallejo, ha destacado la importancia de esta medida “para tener un tejido empresarial potente": "Si buscamos empresas muy competitivas y grandes hay que favorecer que así sea y no ponerles trabas".
La presidenta de AEFA, Maite Antón, ha afirmado que “las empresas familiares, por su peso en el empleo, su persistencia en el mantenimiento del mismo en épocas de crisis y por su arraigo al territorio, suponen el verdadero motor económico y social de la Comunitat".