VALÈNCIA (EFE). El Fondo de Apoyo a la Solvencia de Empresas Estratégicas, gestionado por la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (Sepi), cumple este sábado un año de vida con cinco rescates aprobados por un total de 1.080,8 millones de euros.
De esta forma, desde julio de 2020 hasta la fecha, se ha ejecutado un 10,8 % de los 10.000 millones de euros con los que está dotado este instrumento, creado para prestar apoyo público temporalmente a empresas estratégicas que atraviesen "severas dificultades" por la crisis de la covid-19.
Tras tres meses y medio sin aprobar ningún nuevo rescate, Tubos Reunidos acaba de firmar con la Sepi los contratos para recibir una ayuda pública de 112,8 millones de euros, que se espera que sea aprobada definitivamente en los próximos días, para recibir el dinero en julio, mientras que decenas de sociedades siguen a la espera de ese balón de oxígeno.
Fuentes de la Sepi aseguran que se está trabajando "a pleno rendimiento" y lo lógico es que se vayan aprobando de forma secuencial operaciones que llevan varios meses estudiándose.
Cada operación tiene su complejidad en función del dinero solicitado o del tamaño de la empresa, entre otros aspectos, por lo que una solicitud puede resolverse antes que otra.
Además, algunas operaciones pueden estar pendientes de que la empresa negocie previamente con los bancos la reestructuración de la deuda, lo que hace que la aprobación del rescate tarde más.
La firma de tubos vasca se suma a Air Europa, la primera en recibir la ayuda solicitada, de 475 millones de euros, en noviembre de 2020, así como a Plus Ultra (53 millones), Duro Felguera (120 millones) y Ávoris Corporación (320 millones) que lo lograron en marzo de este año.
No obstante, el rescate está sujeto a una serie de condiciones, lo que hace que, por ejemplo en el caso de Duro Felguera, después de que la Sepi liberara 40 millones a principios de mayo, aún no se haya cerrado su segunda fase (los 80 millones restantes).
Entre otros requisitos, el grupo tenía que encontrar un socio industrial hasta el 30 de junio, la fecha límite que Duro Felguera ha conseguido extender esta semana hasta el 30 de septiembre.
Por su parte, la ayuda concedida a Plus Ultra desató fuertes críticas de la oposición y parte del sector empresarial e, incluso, se ha abierto una investigación judicial, siendo lo último la admisión a trámite por parte del Tribunal de Cuentas de la denuncia de Ciudadanos para que la Fiscalía y a la Abogacía del Estado analicen si hay indicios de responsabilidad contable en esta operación.
Hasta la fecha medio centenar de empresas ha llamado a la puerta del fondo de rescate, muchas de ellas del sector turístico, entre las que figuran Wamos (75 millones), Hesperia (55), Room Mate (52), Hotusa (200), Soho (32), Serhs (35), Juliá (37) o la aerolínea Air Nostrum (103).
También han solicitado ayudas compañías como Naviera Armas, Hotelatelier, Abades o la agencia de viajes Pangea.
Fuera del sector turístico, las peticiones provienen de Abengoa, que demanda 249 millones a través de su filial Abenewco 1, la tecnológica Airtificial (30), Grupo Villar Mir (240) o la cadena de gimnasios Holmes (26), entre otras.
Hasta el momento, la petición más elevada es la de Celsa, la mayor siderúrgica española, con unos 700 millones, al tiempo que la de Mediapro podría rondar los 300 millones.
En marzo, el Gobierno amplió de junio a diciembre el plazo para poder solicitar estos rescates, destinados a empresas consideradas estratégicas, consideración que podrán tener por distintos motivos, como impacto social y económico, relevancia para la seguridad, la salud de las personas, las infraestructuras, las comunicaciones o contribuir al buen funcionamiento de los mercados.
