VALÈNCIA. El Sevilla FC es el único club español que figura en la edición de este año del informe elaborado por la Bolsa de Londres titulado '1000 companies to inspire Europe 2018'. Tal y como avanzó ayer este diario, este año se dejan ver en dicha publicación hasta 75 empresas españolas, quince de las cuales están domiciliadas en algún punto de la Comunitat Valenciana.
Dicho informe recoge las pequeñas y medianas empresas (pymes) más dinámicas y de más rápido crecimiento en toda Europa, ofreciéndoles formar parte del programa Elite de la bolsa londinense para acceder a la financiación a través de cotizar en un mercado bursátil. Pero no solo ello sino también se les ofrece asesoramiento y asesoría profesional.
Los expertos del London Stock Exchange Group, la bolsa londinense, sitúan los ingresos del club presidido por José Castro entre los 100 y 150 millones de euros. Una cifra ligeramente inferior a los 162,78 millones del coste de la plantilla sevillista, tal y como publicó Plaza Deportiva hace dos semanas, que la convierte en la quinta por detrás de los intratables FC Barcelona (633 millones) y Real Madrid (566), además del Atlético de Madrid (293) y Valencia CF (164), según datos de LaLiga.
La entidad de Nervión sucede al siempre correoso Eibar, que fue incluido en el informe del pasado año junto con otras 69 empresas españolas y, entre ellas, siete domiciliadas en la Comunitat Valenciana. Pero lo cierto es que todavía ningún club español se ha animado a salir a financiarse a través de los mercados financieros, tanto de fuera como de dentro de España. El que estuvo más cerca de hacerlo fue el Intercity San Joan, tal y como avanzó Alicante Plaza, el pasado 7 de junio.
Fruto de la fusión por absorción del club de l'Alacantí con el Novelda encontró el apoyo financiero de Salvador Martí y Javier Mira, cofundadores de la firma de reconocimiento facial FacePhi -que por cierto cotiza en el Mercado Alternativo Bursátil (MAB)-, pero la RFEF tumbó la fusión un mes después como también adelantó Alicante Plaza.
El motivo esgrimido por la Real Federación Española de Fútbol fue el no cumplir con el requisito geográfico, pese a que se modificaron los domicilios sociales de ambos clubes para permitirlo. No obstante, el Intercity se ha convertido en sociedad anónima deportiva y mantiene su voluntad de cotizar en el MAB.