VALÈNCIA. La Sociedad de gestión de activos procedentes de la reestructuración bancaria (Sareb) sacó a subasta 16 inmuebles en el municipio de Castellón por los que ha recibido pujas que como máximo suponen el 40% de su valor total. La subasta, celebrada hasta el 24 del pasado mes de febrero, se cerró con pujas en todos sus lotes, que estaban valorados en 1,7 millones. Y las pujas máximas, en suma, ascienden a 543.000 euros aproximadamente.
Así consta en el cierre de subasta donde la compañía ponía a disposición los 16 inmuebles que suman más de 1.055 metros cuadrados y que están ubicados en una misma finca, emplazada en la zona costera de la localidad, en el Grau de Castelló. Concretamente, en la franja del Grau más próxima al Puerto de Castellón, en la calle Gravina.
Aunque los activos estaban tasados en 1,9 millones de euros, con la enajenación mediante subasta judicial, la Sareb -antes conocida como banco malo- buscaba cobrarse una deuda superior a los 1,7 millones de euros que corresponde a una compañía radicada en Barcelona. Con todo, las pujas máximas suman no suman más de 550.000 según el cierre de subasta.
La subasta constaba de 16 lotes -uno para cada inmueble-, de los cuales 7 corresponden a diferentes pisos del mismo bloque. Las viviendas oscilan entre los 81 y los 118 metros cuadrados, y entre todas ellas suman 729 metros cuadrados. Cuatro de las siete viviendas en cuestión son de tipo dúplex. Salían a puja por un valor, cada una, de entre 200.000 y 290.000 euros, pero finalmente las pujas máximas registradas oscilan entre los 66.800 y los 80.700 euros.
Los otro nueve lotes correspondían a plazas de aparcamiento sitas en la misma finca. En este caso, todas las parcelas cuentan con un tamaño similar: poco más de 36 metros cuadrados. Tres de ellos salían a subasta por un valor de 13.500 euros, mientras que el resto, lo hace por valor de 14.590 euros. Y en estos casos, las pujas registradas también han sido de bastante menor valor que el valor inicial: de entre 4.200 aproximadamente y 15.000 euros.