MADRID (EP). Senadores del PP consultados por Europa Press coinciden en que la exalcaldesa Rita Barberá debería dimitir y devolver su acta de senadora ante la envergadura de la Operación Taula --investiga por blanqueo al grupo municipal 'popular' en el Ayuntamiento de Valencia-- si quiere dar una imagen contundente contra la corrupción.
Barberá no ha asistido esta semana a la Cámara Alta a la constitución de las comisiones en las que trabajarán los senadores ni de la Diputación Permanente en la que ha sido incluida de nuevo por su partido, un hecho que le garantiza el aforamiento aunque se disuelvan las Cámaras por una convocatoria electoral.
El PP registró el pasado viernes los nombres de sus representantes en la Diputación Permanente, incluida Rita Barberá. El lunes por la mañana la dirección nacional del PP dejó claro que no quería a la exalcaldesa como presidenta de ninguna comisión y ese mismo día se le comunicó al exvicepresidente del Senado Juan José Lucas que sucederá a Barberá al frente de la Comisión Constitucional del Senado.
La continuidad de Barberá y su ausencia estos días ha sido la 'comidilla' de los parlamentarios del PP, que están preocupados por cómo este nuevo caso de corrupción en Valencia vuelve a perjudicar la imagen del partido.
Por eso, senadores del Partido Popular consultados por Europa Press consideran que la exregidora debería marcharse para reducir "la presión" sobre el partido y Mariano Rajoy, pero también sobre ella misma.
"El PP necesita demostrar una pulcritud y ser implacable contra la corrupción ante los ciudadanos. Es que no es ni uno ni dos ni tres los concejales que han metido la mano. Son casi todos y no es justificable", resume un parlamentario 'popular', que recuerda que la investigación por blanquear dinero en la última campaña de las municipales se extiende prácticamente a todo su equipo municipal en el Consistorio de Valencia.
En este sentido, fuentes del PP consideran que a la dirección nacional le ha faltado "diligencia" porque lo que se está investigando en Valencia "pinta mal". Ante la corrupción, añaden, la respuesta debe ser "siempre rápida y contundente".
"No podemos permitirnos ningún tipo de flexibilidad. La reacción tiene que ser inmediata", sostiene un senador 'popular', que cree que si se demuestra que no está implicada en nada ya habrá tiempo de "restituirla" en el partido. Otro parlamentario cree incluso que 'Génova' debería pedir públicamente que la exalcaldesa se marche porque si al final lo va a acabar haciendo, por lo menos no se estarían "desangrando por el camino".
Por eso, las fuentes consultadas critican que 'Génova' haya dado luz verde a su continuidad en la Diputación Permanente del Senado, prolongando su aforamiento incluso si se disuelven las Cortes. En el Grupo Popular hay quien sostiene que ella misma debería haber tenido el "gesto" de pedir que no se la incluyese en ese órgano, dejando claro que "no tiene miedo a la Justicia" y renuncia al aforamiento.
Las mismas fuentes advierten de que la dirección nacional del PP está actuando ahora con Barberá como el PSOE hizo en su día con los expresidentes Manuel Chaves y José Antonio Griñán, que se mantuvieron en su escaño hasta junio del año pasado, cuando el Tribunal Supremo confirmó que seguía investigándolos por el caso de los ERE.
Otras fuentes consultadas señalan que, aunque Barberá debería haber dado un paso atrás, comprenden que pueda estar pendiente en este momento de saber qué es lo que hay realmente contra ella antes de tomar cualquier decisión.
El jefe del Ejecutivo en funciones, Mariano Rajoy, ya ha dicho estas semanas en varias ocasiones que si ese paso judicial se produce, el partido actuaría contra ella "como con cualquier otro militante".