VALÈNCIA. El PPCV vive de manera frenética las últimas jornadas en lo que supone un cambio de ciclo para el partido. El congreso regional del que saldrá su nuevo líder se celebrará el próximo 3 de julio en València. Y el objetivo desde el principio es que se trate de una cita de total unidad después de que la dirección nacional haya ungido al presidente de la Diputación de Alicante, Carlos Mazón, como la persona que pilotará la formación a partir de ahora.
La semana arrancaba con el anuncio de Isabel Bonig de que no se postularía para tratar de revalidar la presidencia. Una decisión forzada por Génova después de que Pablo Casado y su 'número dos', Teodoro García Egea, le comunicaran que el favorito era Mazón. De hecho, las prisas llevaron a que se comunicara en plena jornada de reflexión de las elecciones madrileñas. Este miércoles reapareció en Les Corts Valencianes, pero evitó que la sesión de control al president de la Generalitat, Ximo Puig, se convirtiera en su despedida oficial. Por último, ayer jueves ofreció una rueda de prensa para trasladar que abandonaba la portavocía del Parlamento autonómico y el acta de diputada.
Su adiós se extendió, posteriormente, al hemiciclo con un discurso y, ya por la tarde, a la Junta Directiva Regional del partido celebrada de manera telemática. En ella se fijó el congreso, para el que la presentación de precandidaturas se prolongará hasta el 14 de mayo con un mínimo de 90 avales. El Comité Organizador (COC) lo conforman perfiles de diferentes familias (de Mazón, de Bonig y del presidente de la provincia de Valencia, Vicente Mompó). Lo presidirá el diputado nacional Luis Santamaría, al que le acompañarán Adrián Ballester (vicepresidente), Andrés Martínez (secretario) y, como vocales, Juan Carlos Caballero, Vicente Ibor, Amparo Folgado, Sota Ibáñez, Óscar Clavell, Mª Ángeles Pallarés, Juan de Dios Navarro, Magdalena Martínez, Silvia Fernández García y Ernesto Fernández Pardo.
Las votaciones para elegir a los precandidatos y a los compromisarios se desarrollarán en las sedes locales en un día por determinar. Según los estatutos, habrá una primera vuelta en la que cada afiliado podrá apoyar al precandidato que considere. Y, si hubiera una segunda vuelta, los compromisarios –un total de 998– escogidos previamente serán los encargados de votar al candidato final, sería posteriormente proclamado.
La carrera arranca este mismo viernes, cuando Carlos Mazón se presentará como aspirante durante una rueda de prensa en la sede del PPCV. Posteriormente, se hará una foto de familia con cargos del partido en el Parterre, como ha publicado Valencia Plaza. Un lugar emblemático por la estatua de Jaume I y en el que se realiza cada año la ofrenda institucional del 9 d'Octubre. La idea es que el acto escenifique la unidad de la mayoría de familias del PPCV y tendrá que dar a conocer a su equipo de campaña.
Es muy probable que esté acompañado por la portavoz 'popular' en el Ayuntamiento de València, María José Catalá, a la que se sitúa como su 'número dos' (secretaria general). También por representantes de la ciudad –por ejemplo, presidentes de distrito– y de las tres provincias –especialmente de Valencia, con Vicente Mompó al frente–, además de diputados y senadores.
Mientras, el único contrincante que por el momento tiene –el alcalde de Ayora, José Vicente Anaya–, asegura que sigue adelante con su candidatura a la espera de si finalmente se retirará.
Aparte de para el congreso, la Junta Directiva Regional de ayer sirvió para que Bonig hiciera un recorrido de su gestión y para agradecerle su labor al frente del partido. Con Carlos Mazón y María José Catalá presentes, la todavía presidenta del PPCV destacó que no se arrepentía de haber cogido las riendas de la formación en el peor momento ni de haber dado la cara cuando se la partían, pese a que no había tantos candidatos a dirigirlo como ahora. Recordó, en este sentido, cuando ninguna asociación se quería reunir con ellos al ser protagonistas de casos de corrupción.
Realizó un reconocimiento, igualmente, "al PP de Isabel Díaz Ayuso", sin mencionar a Casado, tras el resultado del 4-M, y remarcó que ella y su equipo entregan el partido en condiciones de pelear. Así, comentó que seguirá ayudando a que ganen en los Ayuntamientos y la Generalitat y que a partir del 3 de julio será una militante del PP en la Vall d'Uixó.
Posteriormente, llegaron los agradecimientos de diversos cargos 'populares' hacia Bonig por su trabajo, incluyendo Mazón, quien remarcó que cuando ella llevaba poco tiempo en política él ya había dejado la primera línea. Catalá, sin embargo, acabó abandonando la reunión después de pedir en reiteradas ocasiones el turno de palabra –desde su entorno indican que porque tenía que dar clase–.
Entre la labor de oposición, se mencionó la investigación a Francis Puig, hermano del presidente de la Generalitat, Ximo Puig, la de la financiación del PSPV y el Bloc por presunta financiación irregular que acabó archivada por prescripción o los cinco decretos del Consell tumbados por los tribunales.