Podemos se abstiene en la votación de una comisión de investigación sobre los nombramientos en la conselleria de Sanidad y propicia la aprobación de la iniciativa del PP, respaldada por C's
VALENCIA. Desde el arranque de la novena legislatura se ha popularizado en el entorno político valenciano la expresión "gobierno con mando a distancia" para referirse al papel de Podemos en les Corts y en el Gobierno valenciano. La formación morada que lidera en la Comunitat Antonio Montiel formalizó su apoyo al Ejecutivo valenciano -del que no ha querido formar parte- firmando el Pacto del Botánico y ha expresado en numerosas ocasiones que su postura es la del control parlamentario y crítico de la labor del Consell de PSPV y Compromís.
Este "mando a distancia" de Podemos tiene la peculiaridad de que no siempre aprieta el botón de OK e incluso cambia de canal. Cuando esto ocurre, saltan algunas chispas en el Ejecutivo de Ximo Puig y Mònica Oltra.
El último caso de zapping se da ahora con la última comisión creada en les Corts para investigar los nombramientos en la consellería de Sanidad, a propuesta del PP y respaldada por Ciudadanos. La moción, ya aprobada, insta a crear una comisión de seguimiento de los 202 nombramientos de altos directivos de la Conselleria de Sanidad, dirigida por Carmen Montón, quien ya fuera polémica por la designación de su marido como gerente de Egevasa.
Cuando en el hemiciclo daban por sentado que se iba a rechazar la propuesta (PP y C's suman 40 diputados, mientras que Compromís, PSPV y Podemos 48), sorprendiendo incluso al president de les Corts, Enric Morera, quién se disponía a leer que la propuesta quedaba rechazada, se observó la abstención de los 12 diputados de la formación morada. Quedó entonces la votación 40 a 36, con 12 abstenciones y un voto nulo, saliendo así adelante la propuesta de los populares para denunciar el "enchufismo" en la consellería de Montón.
Podemos es decisivo para obtener mayoría en una votación y sacar adelante la propuesta. Sin el apoyo de la formación morada, el Consell bipartito no puede aprobar sus iniciativas. Montiel comenzó sus andanzas parlamentarias dejando claro que no iba a ser un títere del Consell cuando en la investidura de Puig como president permitió que pasara con la mayoría justa mediante algunas abstenciones estratégicas en su partido.
Las negociaciones entre los tres partidos son constantes y las maniobras de la formación de Montiel coqueteando con Ciudadanos y PP no gustan dentro del Palau, especialmente cuando éstas afectan de lleno a la imagen del líder de los socialistas. Sin embargo, Podemos es más cuidadoso y trata de no afear la gestión de Compromís, con cuya líder, Mónica Oltra, ha mostrado afinidad continuada. Tras estrenarse metiendo el dedo en la llaga, la formación morada ha propinado alguna patada bajo la mesa del Palau.
Ocurrió en primer lugar con el veto a las emisiones de RTVV el 9 de Octubre. Contra lo anunciado por Puig a bombo y platillo desde la campaña electoral hasta apenas 4 días antes de la negativa, Podemos retrasó la votación de la proposición de ley que daba luz verde a las emisiones provisionales. En su lugar, el líder de la formación morada, que preside la comisión de la reapertura del ente público, convocó el Foro del Audiovisual para tratar las repercusiones jurídicas, legales y económicas del nuevo Canal 9.
El segundo toque de atención vino a raíz de la comisión de estudio de la mercantil Carns de Morella. De nuevo, con Puig en el ojo del huracán y, de nuevo, acercándose a las posturas de PP y Ciudadanos. Podemos planteó una enmienda para eliminar la partida nominativa a Carns de Morella y ampliarla a todos los mataderos. Lo mismo ocurrió con la Comisión de Investigación que planteaba el grupo popular, que finalmente Podemos hizo extensiva a una investigación de todos los mataderos de la Comunitat.
Amparándose en la transparencia y los valores democráticos, palabras que Podemos puso desde su aparición en el vocabulario de muchos partidos, Montiel ha propiciado mediante iniciativas o abstenciones más de un golpe al gobierno dirigido por Ximo Puig. El choque entre la autodenominada "nueva política" con la "vieja política" también encaja a nivel nacional, donde PSOE y Podemos han tenido tira y afloja continuos y con especial incidencia en el periodo de negociaciones para el Gobierno central.
El grupo parlamentario ha justificado su abstención defendiendo que "los cargos públicos no pueden estar al albur de criterios que favorezcan políticas clientelares de partido". Gracias a esta medida se publicará en el Portal de Transparencia la situación en la que se encuentra cada uno de los procedimientos establecidos para la designación de los altos cargos de Sanidad, así como un registro de los nombramientos del personal directivo de las distintas consellerias y empresa públicas.