Nomad Xàbia. Imágenes cedidas por Nomad Hotel Collection.BENIDORM. No era fácil abrir en medio de una pandemia, pero hay quienes lo intentaron y lo consiguieron: en 2020 se inauguraba Nomad Hotel Collection en Xàbia. Un concepto de establecimiento sostenible, con atención al diseño, apuesta por la artesanía local y el intercambio cultural. Todo ello parte de un sueño, el de su fundadora, Mónica Mascarós, nacida en Dénia y con una trayectoria profesional en el sector de los cuales 18 años los pasó en el extranjero, sobre todo en Dubái. Un recorrido internacional que le permitió el éxito de su negocio a pesar de la crisis sanitaria que afectó en gran medida al turismo, y que como muestra, además de seguir en pie, prepara la apertura de tres nuevos establecimientos en grandes destinos: Dénia, Altea y Benidorm. Algunos de ellos singulares y con historias llamativas.
Según explicó la empresaria a este diario, la intención es abrir estos alojamientos en 18 meses, es decir, en 2024. Para ello, ya están trabajando sobre terreno. Aunque la inversión se desconoce, para la primera gran expansión de la marca cuentan con proyectos propios a la vez que han firmado colaboraciones de inversión. Eso sí, en todos los casos, la gestión y el diseño de los establecimientos estarán en manos de Nomad.
Mascarós, que no es partidaria de mencionar su empresa como una cadena hotelera, explica que la intención es crecer de manera orgánica y paulatina. Primero en la Comunitat Valenciana, y después, ya se verá. En todos estos nuevos alojamientos se parte ya de un edificio singular sobre el que se basa la idea y la reforma.
El de Benidorm se sitúa en la Cala, en el límite con Finestrat. Se trata de un antiguo hostal que perteneció al conocido futbolista del FC Barcelona, Ladislao Kubala, según han podido constatar. Una construcción de los años 50 que reabrirá sus puertas como hotel de cuatro estrellas. Seguirá la filosofía de Nomad, con aire retro y enfocado a un público de viajes en pareja o familiar. "Benidorm es un mercado polivalente", destacó Mascarós. Como en el resto de proyectos, pondrán atención a la sostenibilidad, intentando recuperar materiales en la reforma y dando espacio a artistas locales. Las obras ya están en marcha y se configurará en 22 habitaciones, de las que cuatro serán para familias. Además, dentro de sus zonas comunes habrá dos piscinas, una interior y otra exterior.
También abrirán en Altea, donde ya gestionan un edificio de apartamentos bajo la marca Nomad Stays. De hecho, así es como comenzó el negocio en Xàbia. Sus primeros alojamientos fueron en la Marina Alta con alquiler vacacional hace cinco años. Tras esto, llegó el hotel, también en Xàbia, y, desde hace unos meses, en Altea con la apertura de Casa Los Yayos. Ahora, en la Villa Blanca seguirán ampliando su presencia con el nuevo establecimiento en construcción. En este caso, se trata de una casa del casco antiguo que debido a la situación en la que se encontraba el edificio, han tenido que derribarlo para levantarlo de nuevo. Sin embargo, Mascarós explicó que el proyecto recuperará la imagen de la fachada original.
"La idea es que los huéspedes sientan que están visitando a su familia", dijo. El nuevo hotel tendrá 23 habitaciones, algunas de ellas con jacuzzi en la terraza privada, spa, piscina interior y plunge pool (pequeña piscina) en el patio central sobre las que se disponen los dormitorios. Además de su marcada línea de diseño interior, la decoración también incluirá un estilo inspirado en un riad de Marruecos. Debido a sus servicios, se configurará como un hotel de cinco estrellas.
La misma categoría que tendrá el último proyecto por mencionar, el de Dénia, ya en el municipio que vio nacer a la fundadora y directora creativa de la empresa. Allí han adquirido una casa con una historia singular: perteneció a un nazi que buscó cobijo en la localidad una vez terminó la Segunda Guerra Mundial, tal y como han podido comprobar en los archivos históricos. Se trata de una casona de los años 50 que se convertirá en un resort con diez unidades, de las que cinco suites estarán en la casa principal y otras cinco serán casitas en el jardín con espacios y jacuzzis privados, todas con vistas al mar y acceso directo a la playa de Les Rotes.
Pero esto no se queda aquí. La idea es seguir creciendo cuando sea posible, en los dos formatos y "sin perder la esencia". Están abiertos a gestionar edificios en Benidorm bajo el mismo modelo de Altea y Xàbia con los que ya tienen experiencia. Pero también con los hoteles boutique. Precisamente, Mascarós señala que Nomad es fruto de encontrar un nicho de mercado en este formato de alojamiento más pequeño y "con encanto". Para ello, buscan que sean icónicos, tanto el destino como el edificio para poder "marcar la diferencia".
Debido a este empuje, el equipo está creciendo. Su base se mantendrá en Xàbia, afirma, y desde ahí, se irá expandiendo con nuevos destinos. A pesar de las dificultades que están teniendo en el sector para incorporar y cubrir todos los puestos, el objetivo lo han cumplido y con las exigencias pretendidas. Debido al carácter internacional que defiende la compañía, buscan trabajadores con experiencia laboral en el extranjero, que dominen varios idiomas y estén en sintonía con la filosofía de Nomad.
"El hotel es el viaje" es uno de los dogmas de la empresa sobre los que se asienta el concepto. La conexión con las emociones, lo olores o el impacto visual, todo ello con el objetivo de que el huésped "se sienta como en casa o mejor".
Alojamiento en Dénia. 
