VALÈNCIA. Mónica Oltra ha reaparecido públicamente. Lo ha hecho cinco meses después de dimitir en dos tímidos actos. Y lo ha hecho con normalidad. Tanta que no se ha desprendido de sus palabras ninguna interpretación política sobre su situación o su futuro. Sólo alguna declaración osada que poco extraña en su boca, y más fuera de la política. Las expectativas de los medios a veces se quedan únicamente en eso.
La exvicepresidenta de la Generalitat ha permanecido alejada de los focos tras su renuncia a consecuencia de ser citada a declarar como imputada por obstaculizar la investigación de los abusos sexuales de su exmarido a una menor tutelada. Pero ha decidido participar de manera pública de nuevo en lo que más pronto que tarde se comprobará si es algo puntual o no.
Lo ha hecho en dos eventos esta semana. El primero fue en Ca Revolta en una charla sobre desigualdades sociales y en la que intervino el pasado martes como socia del centro. Estuvo acompañada por la vicepresidenta del Consell y conselleria de Igualdad y Políticas Inclusivas, Aitana Mas, entre otros cargos de este departamento.
El segundo fue este jueves, donde ejerció de presentadora de libro "Tercera edició: sexe, llibres y lawfare", escrito por el secretario autonómico de Empleo, Enric Nomdedéu, en Octubre Centre de Cultura Contemporània. Se trata de una ficción vinculada a la propia experiencia del dirigente, que fue investigado por malversación y falsedad documental en el llamado 'caso de los sobres' por el presunto envío de cartas con propaganda electoral mediante sobres del consistorio y a cargo de las arcas públicas. Después de cinco años de procedimiento judicial, fue absuelto el pasado enero (si bien el libro lo entregó antes del juicio y la absolución). "Todo lo mío y lo de Mónica pasó después", advirtió al inicio de su alocución.
La mayor parte de asistentes al acto fueron cargos de las tres patas de Compromís. Pudo verse al presidente de Les Corts, Enric Morera; a la consellera de Agricultura, Isaura Navarro; a la líder de Més Compromís (antiguo Bloc) Àgueda Micó; al coportavoz de Iniciativa y asesor en la Conselleria de Igualdad Alberto Ibáñez; a la secretaria autonómica de Salud Pública Ofelia Gimeno; a la directora general de Innovación Educativa Reis Gallego; a los diputados Juan Ponce, Carles Esteve o Ferran Barberá; y al senador Carles Mulet.
Oltra tiró de humor en la presentación. "Hay una palabra en el título del libro que, dadas mis actuales circunstancias, no me podía resistir a comentar. Efectivamente, sexo. Porque no ha mejorado la cosa. Creía que salir del Gobierno iba a mejorarlo, pero no", comentó.
La exvicepresidenta destacó que es "un libro catártico con historias personales muy duras" y psicoanálisis en el que Nomdedéu "se desnuda". Igualmente, opinó que describe muy bien cómo fue la corrupción del gobierno anterior al Botànic de "las derechas corruptas" . "No creo que gane ningún premio literario porque pone a parir todos los concursos, pero es divertido", bromeó, a la vez que destacó que en la novela "hay paralelismos entre las relaciones humanas y la política". También descubre, añadió, "que el núcleo irradiador de Íñigo Errejón es el clítoris".
Por su parte, Nomdedéu remarcó que escogió "la literatura como venganza" a lo que le había sucedido. "La política es hacer el bien y sólo la deberíamos hacer las buenas personas. Pero hay muchos que no lo son y que sólo hacen por destruir", dijo. La novela, comentó, va de un conseller víctima del lawfare (la llamada guerra jurídica por el uso de los tribunales para desgastar al oponente político).
"Quería explicar que se pasa mal, que hay momentos muy duros. Hay un desgaste económico, político y reputacional, pero sobre todo emocional y familiar. La historia del libro no ha pasado pero acabará pasando. Que se utilice cualquier recurso para acabar con alguien por pensar de una determinada manera. Eso es un ataque a la democracia", apuntó.