Representantes institucionales y de Parc Sagunt, el día que se reanudaron las obras. Foto: GVAVALÈNCIA. El tiempo para que las empresas interesadas en instalarse junto a Mercadona en Parc Sagunt puedan comprar suelo a los precios actuales se agota. La fase de adjudicación directa de las parcelas, disponibles con un descuento medio del 13% respecto al anterior periodo de comercialización, concluye el próximo mes de julio y la sociedad gestora del parque ya ha puesto en marcha los trámites para tasar de nuevo las parcelas, que probablemente subirán de precio por el aumento de la demanda que ha generado la llegada de la empresa de Juan Roig.
La sociedad gestora del parque necesita tener lista la nueva valoración de los solares disponibles –cerca de medio millón de metros cuadrados en total– para poner en marcha el nuevo proceso de venta nada más concluya el actual. De lo contrario, la venta tendría que quedar en suspenso hasta que concluyeran los nuevos trámites. La fecha límite es el 29 de julio.
El objetivo, según explican fuentes del Parc Sagunt, es llegar a esa fecha con las obras del parque terminadas y el nuevo concurso para colocar los solares convocado. Tras invitar a las empresas tasadoras a que remitan sus propuestas, el consejo de Parc Sagunt seleccionará la oferta más ventajosa para que realice el encargo. Con el resultado de la tasación, la sociedad redactará un nuevo pliego para colocar el suelo disponible.
A diferencia de la modalidad que se eligió hace un año, cuando Parc Sagunt acordó rebajar precios y convocar una subasta que acabó desierta, en esta ocasión el suelo se adjudicará por concurso. La diferencia es que, además del precio, ahora se tendrá en cuenta la inversión prevista, los plazos previstos de ejecución o la creación de empleo prevista, entre otras variables.
Al quedar desierta la subasta anterior, las parcelas pasaron a adjudicarse de forma directa. Esta ha sido la modalidad en la que Mercadona se ha hecho con la mayor parcela logística del parque, de 385.000 metros cuadrados, por 24 millones de euros. La llegada del gigante de la distribución al parque, donde prevé levantar un mega almacén desde el que abastecerá a todos sus centros logísticos, ha aumentado el interés por las parcelas disponibles a su alrededor.
La instalación de la empresa de Juan Roig en este parque logístico, que en el futuro mejorará sus conexiones mediante acceso ferroviario al Puerto de Sagunto y con el norte de España a través de Teruel y Zaragoza, es el embrión para la creación de su propio gran parque de proveedores al estilo del de Ford en Almussafes. Espacio no le falta, ya que todavía hay más de medio millón metros de suelo industrial y 40.000 de logístico sin dueño.
La Conselleria de Economía asegura que la cantidad de llamadas de empresas que se interesan por este espacio ha aumentado desde que Mercadona anunció sus planes. Aún así, apenas se han concretado un par de transacciones. La previsión es que en los dos meses de plazo que restan al periodo de adjudicación directa el interés dé paso a la concreción de operaciones.
Según explican fuentes de la sociedad gestora, la demanda es muy heterogénea y procede de empresas de diferentes sectores y de diferentes tamaños. En las últimas semanas se están organizando visitas al parque para conocerlo in situ. "Va todo razonablemente bien", aseguran estas fuentes.
La venta en la modalidad actual finaliza el 29 de julio. A partir de entonces es probable que el precio por metro sea superior al actual porque las obras de urbanización del parque ya habrán finalizado –la fecha prevista de entrega es el 7 de julio– y porque Mercadona habrá definido el volumen de su inversión en Parc Sagunt.
La empresa de distribución ha pedido permisos para realizar pruebas geométricas y topográfica sobre el terreno, por lo que es previsible que el comienzo de la edificación no se demore en el tiempo.
Tras más de una década estancado, con la mayoría del suelo sin vender y las obras por terminar, Parc Sagunt ha pasado en pocos meses de estar al borde de la suspensión de pagos a situarse como uno de los espacios industriales de mayor proyección gracias a la apuesta de Mercadona.
La situación se encarriló cuando la Autoridad Portuaria de Valencia, que en el pasado adquirió la segunda mayor parcela logística del polígono, y Parc Sagunt pactaron una permuta de suelo a cambio de que la APV aportase liquidez para evitar el concurso y poder acabar las obras.
La irrupción de Juan Roig en escena para quedarse con la parcela a la que aspiraba la APV, con la consiguiente entrada de liquidez en Parc Sagunt, cerró definitivamente la crisis de la sociedad, participada al 50% por la Generalitat Valenciana y el Estado a través de Sepides.
