El PSPV fía a la edil Belmonte una investidura 'in extremis' en Alicante: dos votos en riesgo

ALICANTE. El PSPV afronta las últimas 24 horas para tratar de garantizar la investidura de la socialista Eva Montesinos como alcaldesa de Alicante, en sustitución de Gabriel Echávarri, tras el registro de su dimisión el lunes 9 de abril. Y se auguran frenéticas, con varias citas y cruces de llamadas de última hora, ya que, a una jornada del desarrollo del pleno, sigue habiendo dos votos en duda sobre el tablero. Se trata del de la edil no adscrita, Nerea Belmonte, que sigue sin definirse; y el de la edil de Guanyar, Julia Angulo, que continúa reclamando medidas contundentes tras el altercado protagonizado por un miembro de la ejecutiva socialista durante la visita protocolaria girada por el expresidente de Ecuador, Rafael  Correa, a Alicante, el pasado miércoles.

Sobre Belmonte. La exrepresentante de Guanyar (expulsada de su grupo, del equipo de Gobierno y de Podemos por dar contratos menores de manera directa a personas de su entorno, sin que se abriese ninguna investigación al respecto) todavía no ha confirmado que esté dispuesta a respaldar la toma de posesión de Montesinos. Al parecer, continúa esperando que se le ofrezcan garantías de que se va a promover su restitución moral: el compromiso de que se va a elevar a pleno la reforma del Reglamento Orgánico del Pleno (ROP) que abriría la puerta a que se le reconociesen los mismos derechos políticos y económicos que al resto de concejales de la oposición. 

Con ese acuerdo, ella y el segundo edil no adscrito, Fernando Sepulcre (exrepresentante de Ciudadanos), tendrían la capacidad de presentar mociones y declaraciones institucionales y formar parte de todas las comisiones no permanentes del pleno, en las que ahora se les excluye. Además, podrían quedar rehabilitados para disponer de retribuciones, aunque Sepulcre ya las percibe en la Diputación Provincial desde que Cs firmó el pacto para la investidura del popular César Sánchez. 

Ese segundo acuerdo, el de la posible asignación de un sueldo a Belmonte como el que reciben el resto de concejales de la oposición en la corporación de Alicante, es el que no estaría garantizado. PSOE, Guanyar y Compromís comparten la necesidad de reformar ese reglamento, en cumplimiento de la promesa incorporada al pacto que dio lugar a la conformación del ya extinto tripartito, tras las municipales de 2015. Máxime, cuando se cuenta con un informe del secretario municipal que avala la reforma propuesta por Belmonte y otro de la Asesoría Jurídica municipal, reclamado por Guanyar, que confirma las conclusiones del secretario. Ahora bien, aunque según las fuentes consultadas, no se ha llegado a plantear formalmente esa segunda fase (el sueldo), lo cierto es que Guanyar difícilmente podría prestar apoyo a la iniciativa, ya que se sigue considerando que Belmonte es una tránsfuga que debió dimitir cuando la asamblea se lo reclamó formalmente.

En ese caso, sería el PP quien tendría la llave para que Belmonte pudiese tener una retribución, ya que Cs tampoco estaría dispuesto a apoyar su concesión, cuando persiste en su crítica por la consolidación del suelo de Sepulcre en la Diputación. En esa tesitura, el PP tendría que retratarse y explicar por qué sí apoya que el exrepresentante de Cs disponga de emolumentos en la institución provincial.

Sea como fuere, la posición de Belmonte podría despejarse este mismo miércoles, cuando se ha previsto un último encuentro con representantes del PSPV para tratar sobre la investidura. Ese encuentro se había previsto para este martes, pero se anuló y se volvió a convocar para este miércoles. El motivo oficial: problemas de agenda. El motivo más probable: todavía no se tenían todas las garantías necesarias sobre la reforma del ROP para poder convencer a Belmonte.

El consejo político de EU

Parte de esas garantías debían llegar desde Esquerra Unida (EU): el socio mayoritario que ejerce el liderazgo en Guanyar. El consejo político de la coalición se reunió este martes para analizar el órdago lanzado por la edil de Guanyar y militante de EU, Julia Angulo, en relación al incidente registrado durante la visita de Correa. Como ha contado Alicante Plaza, la edil exige que el PSOE tome medidas contra el secretario de Inmigración de su ejecutiva, Ricardo Picó, después de que insultase a Correa durante su visita al Ayuntamiento (le llamó corrupto). En caso contrario, viene sosteniendo que no dará su apoyo para que Montesinos se convierta en alcaldesa. Es decir, que probablemente no podría acceder al cargo, al no reunir los 15 votos (mayoría absoluta) que resultan necesarios. O lo que es lo mismo, la Alcaldía pasaría a manos del PP como lista más votada en las municipales de hace tres años.

¿Qué decidió la cúpula de EU respecto al plante de Angulo? Podría considerarse que lo ratificó. "Con respecto al conflicto creado por los incidentes que se produjeron en el acto protocolario del expresidente de Ecuador, Rafael Correa, solicitamos al PSOE que las disculpas que ya han trasladado a la edil Julia Angulo sean públicas, no sólo privadas; y además, seguimos esperando un gesto contundente frente a la actitud del secretario de Inmigración del PSOE", explicó el coordinador de EU, Luis Fernando Sevilla. 

Los esquerraunistas consideraron que el altercado protagonizado por el dirigente socialista merece la adopción de medidas disciplinarias y confirmaron que, en este momento, "la organización no se siente cómoda". ¿Significa eso que los cinco ediles de Guanyar o bien solo Angulo puedan negar su voto a Montesinos si no se da el paso reclamado? Por el momento nadie lo sabe. "No hemos tomado una determinación, esperamos que el PSOE actúe", añadió Sevilla.

De hecho, según las fuentes consultadas, ese gesto del PSOE debería llegar a lo largo de este miércoles, cuando se prevé que se celebren nuevos contactos entre las dos formaciones para dirimir la cuestión. Así que por el momento todo continúa abierto: no hay 15 votos, incluso pese a que los socialistas se comprometan a ejecutar el listado de 50 proyectos planteados por Guanyar como requisito para respaldar la toma de posesión de Montesinos. Entre esos proyectos, se incluye gran parte de las iniciativas incluidas en el pacto de gobierno del tripartito y otros de los caballos de batalla de Guanyar, incluida la municipalización de servicios o el estudio de opciones para la compra del antiguo Asilo de Benalúa.

Por su parte, el PP -el partido que saldría beneficiado de esa situación- mantiene sus críticas sobre las supuestas irregularidades que, a su juicio, se habrían registrado en la contratación del servicio de ambulancias durante el desarrollo de los juegos escolares municipales, impulsada por la Concejalía de Deportes que dirige Eva Montesinos, por un presupuesto de 50.000 euros. El portavoz adjunto del PSOE, Fernando Marcos, insistió este martes en una comparecencia pública, en que todo el procedimiento -en el que se solicitó ofertas a cuatro empresas distintas- se ajustó a la legalidad y que los ataques del PP obedecían a su nerviosismo ante la posibilidad de llegar a la Alcaldía.

Mientras, Sepulcre también reclamó este martes su cuota de protagonismo al exigir que la papeleta de la votación del pleno de investidura incluya su nombre y el de la segunda edil no adscrita, Nerea Belmonte, al considerar que existe jurisprudencia que garantiza ese derecho para los no adscritos. Además, insistió en que la propuesta que formuló al PSPV para convertirse él en alcalde de un gobierno de concentración "parece ahora más razonable que nunca", a la vista de las denuncias públicas del PP sobre Montesinos.