‘Veep’: el triunfo de los políticos mediocres

VALENCIA. Si intentásemos poner en el guión lo que dice Donald Trump, HBO nos diría que es demasiado fuerte». Con esta contundencia se posicionaba la actriz Julia Louis-Dreyfus, protagonista de Veep, la comedia política de HBO que acaba de estrenar su quinta temporada en Estados Unidos el pasado 24 de abril, y que está disponible en España un día después por Movistar Plus.

A seis meses de las elecciones presidenciales, la campaña del polémico candidato republicano Donald Trump, salpicada de declaraciones groseras, insultos y golpes bajos, podría parecernos el caldo de cultivo idóneo para los guionistas de esta punzante ficción. La realidad es todo lo contrario, porque la actualidad política estadounidense en este caso superó a la obra. Según confesaba la actriz durante los últimos Emmy, la serie pasa por un momento difícil al construir la comedia sobre las barbaridades que pueden llegar adecir los políticos, cuando el tono en la campaña para las presidenciales en la vida real está siendo más agresiva que nunca. «Cuando comenzamos a hacer Veep, sabíamos que se trataba de una sátira.

Pero ahora es más bien un documental oscuro», ironizaba de nuevo su protagonista, ganadora de cuatro Emmys consecutivos a mejor actriz de comedia por su papel en la serie.

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Julia Louis-Dreyfus, que ya se hizo tremendamente popular por su papel en Seinfield, interpreta el papel de Selina Meyer, la Vicepresidenta de EEUU que en su momento logró el puesto tras perder en las primarias contra el que se convirtió después en presidente. Éste posteriormente le ofreció ser la Mónica Oltra de EEUU y atraer de paso el voto femenino. Sin embargo su relación con el presidente, personaje que nunca aparece, es inexistente. Selina se pasa la serie preguntando a su secretaria: «¿Ha llamado el presidente?», aunque ella le responda en todas las ocasiones que no. Selina insiste día tras día, dejando en evidencia que es una mujer desocupada pese a tener el segundo despacho más importante de la Casa Blanca.

-Selina: «¡Soy la vicepresidenta de los Estados Unidos,

cabrones estúpidos! ¡Esa puerta debería estar a media altura

para que las personas sólo se pudieran acercar a mi oficina en

sus malditas, jodidas rodillas!». (Veep)

(Lea el artículo completo en el número de mayo de Plaza)