Michael F. Neidorff, presidente de Centene. Foto: CENTENE CORPVALÈNCIA. Centene Corporation (CNC), que controla el 90% del operador hospitalario Ribera Salud, presentó en el primer semestre del año en curso un beneficio ajustado de 1.146 millones de dólares -al cambio 1.270 millones de euros- frente a los 746 millones de dólares -unos 831 millones de euros- cosechados entre enero y junio del pasado ejercicio, tal y como lo ha constatado este diario de la web de la cotizada de Saint Louis (Missouri).
"Nuestros sólidos resultados del segundo trimestre demuestran el impulso financiero y operativo favorable de Centene. Nuestra adquisición pendiente de WellCare reforzará y diversificará nuestras ofertas de productos, aumentará significativamente nuestra escala y brindará acceso a nuevos mercados, mejora la perspectiva de crecimiento a largo plazo de Centene". Así valoró las cuentas el presidente de CNC, Michael F. Neidorff.
Entre los aspectos más destacados del segundo trimestre, Centene recoge en su informe la compra del 40% de Ribera Salud al Banco Sabadell, con lo que la entidad vasellana -ahora domiciliada en Alicante- se queda con un 10% de la firma valenciana. Conviene recordar que desde su entrada en la empresa, el grupo norteamericano y el Banco Sabadell pactaron una ruta de salida para el segundo que, en principio, preveía su desvinculación completa. Sin embargo, a petición del operador sanitario norteamericano, el banco presidido por Josep Oliu se mantendrá como socio minoritario en Ribera Salud.
Además, CNC informó al mercado que espera una mejora de sus resultados para el cierre del año por unas mayores ventas de sus planes de salud Medicaid para personas con menores ingresos. Todo ello pese a que advirtió sobre los mayores costes de su negocio vinculado al Obamacare, es decir, a la reforma sanitaria que llevó a cabo el anterior presidente Barack Obama y que Donald Trump ha tratado de tumbarla por todos los medios.
Mientras tanto CNC sigue digiriendo su última compra (WellCare), que le ha costado al cambio unos 13.400 millones de euros. cambio. Los accionistas de ambas compañías se dieron el 'sí quiero' hace tres semanas, cuyo cierre completo de la operación -una vez obtenidas todas las pertinentes autorizaciones- se ha fijado en el primer semestre de 2020.
Todo ello mientras sigue con la red echada para seguir ganando todavía más músculo. Conviene recordar que en Estados Unidos lleva una decena de compras en los últimos 13 años -incluyendo potentes rivales-; en España -además de la propia Ribera Salud- se hizo en noviembre pasado con la concesionaria del Hospital de Torrejón gestionado por Ribera Salud; mientras que en Europa -al margen de las realizadas en Reino Unido y las que a buen seguro quedan- destaca la compra del 66% de la firma eslovaca Pro Diagnostic Group (PDG), líder en el sector de la radiología y medicina nuclear en su país, a través de la firma valenciana.
Finalmente la acción sigue consolidando niveles, tal y como contó este diario la semana pasada, tras un explosivo rally alcista protagonizado en los últimos tiempos. Los resultados han pasado poco menos que de puntillas, tal y como se aprecia en el gráfico superior, sobre la cotización de uno de los valores que más ha dado que hablar en los años anteriores.
