VALÈNCIA. Pasaba media hora del cierre bursátil de ayer, cuando la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) comunicó un hecho relevante sobre Iberdrola (IBE). La eléctrica anunciaba el aplazamiento del Capital Markets Day -lo que viene a ser su Día del Inversor-, que se iba a celebrar el próximo 13 de mayo. Ni que decir tiene que el causante no ha sido otro que el Covid-19.
"Esperamos convocar el evento de nuevo en el cuarto trimestre de 2020, y anunciaremos la fecha tan pronto como sea posible", se recogía en el hecho relevante remitido al organismo supervisor. Eso sí, la compañía presidida por Ignacio Sánchez Galán mantiene para el próximo 29 de abril la fecha de presentación de sus resultados del primer trimestre.
IBE informó al mercado que está centrando todos sus esfuerzos en las "prioridades inmediatas", como garantizar la protección de todos sus empleados y los de las empresas que les proporcionan servicio, y asegurar el suministro eléctrico a los clientes. De ahí que la crisis sanitaria haya obligado a cambiar los planes de la cotizada vasca. Y no solo en aplazar el Capita Markets Day sino también la actualización de su plan estratégico 2018-2022 que tiene en marcha, que iba a tener lugar en dicho evento.
Dicho plan, bautizado como 'Iberdrola, utility of the future', preveía -por aquello del actual 'efecto coronavirus' que ha provocado un antes y un después- unas inversiones de 32.000 millones de euros. Además, y entre otros aspectos, situar su beneficio al final del periodo entre los 3.500 y 3.700 millones de euros.
La 'hoja de ruta' de la energética recogía también la implementación de un plan de rotación de activos por 3.000 millones de euros, abierto a posibles acuerdos con socios para proyectos renovables ('partnering green'). Junto a esta posible venta en Reino Unido de activos de su filial Scottish Power, Iberdrola también estudiaba la venta de sus plantas de cogeneración en España.
Asimismo IBE contemplaba un incremento progresivo de su remuneración anual al accionista. Las previsiones eran de que este año se situara entre los 0,37 y 0,40 euros brutos por cada acción. Pero la crisis sanitaria manda, por lo que habrá que esperar a la actualización de la 'hoja de ruta' que se marcó en febrero de 2018.
Mientras tanto IBE ha vuelto a pisar terreno positivo este año tras subir ayer en el parqué un 2,08% y alcanzar los 9,108 euros. De este modo, la eléctrica se revaloriza un 1,11% durante este agitado 2020 frente al casi 26% que se desploma el Ibex 35.
Solo Cellnex Telecom (+18,01%), Viscofan (+4,71%) y Acciona (+3,68%) lo hacen mejor -son los cuatro que suben este año dentro del índice selectivo-, que una Iberdrola cuya capitalización se ha elevado hasta los 58.779 millones de euros. O lo que es lo mismo: solo superada por la intratable Inditex con 78.727 millones.