VALÈNCIA. Las cooperativas de facturación viven un momento tenso con la administración pública pero hay usuarios que siguen optando por el modelo. Según la valenciana Factoo, han sumado 700 nuevas incorporaciones en el último mes y medio. A pesar de haber recibido la descalificación por parte del Ministerio de Empleo y Seguridad Social por varias infracciones, la cooperativa fundada por Chema Escrivá ha decidido recurrir y mantener su actividad.
Lo hace tras asegurar que en el caso de cierre por una sentencia judicial devolverán las cuotas a sus asociados. Sin embargo, no lo ve tan claro el profesor de Derecho del Trabajo de la Universidad de València, Adrián Todolí, quien alerta de que los usuarios podrían enfrentarse a "fuertes multas" si se obligara al cierre.
La postura del ministerio para descalificar a la cooperativa está basada en el informe de la Unidad Especializada en el Área de Seguridad Social de la Inspección de Trabajo de Valencia, que llevaba varios meses investigando la actividad de la empresa. "Teniendo en cuenta que las actas de la inspección tienen presunción de veracidad es poco probable que un juez las revoque", señala.
Sanción más pago de la cuota de autónomo
Todolí, quien estará presente en el Congreso sobre el Trabajo en la Economía Colaborativa que se celebrará el 28 y 29 de septiembre en la Universitat de València, asegura que si se determina que la cooperativa no tiene finalidad cooperativista en los términos que marca la ley los particulares o profesionales que la utilicen podrían ser sancionados por no estar dados de alta como autónomos. Esto se sumaría al pago de la cuota con intereses de demora del tiempo que se estuvo utilizando la cooperativa de facturación.
Todolí recuerda que cuando se realizan trabajos esporádicos no es necesario darse de alta como autónomo, solo cuando se trata de un actividad habitual. "El problema de las cooperativas de facturación es que para cumplir la Ley de Cooperativas debe de haber un fin asociativo", señala. "Tienen que poner en común medios, conocimiento o algún aspecto para mejorar profesionalmente, por eso el Estado lo ve positivo y concede privilegios al modelo".
Con todo esto, apunta que las cooperativas de facturación nacen de abajo hacia arriba y no al contrario, como ocurre con este modelo. "No hay un fin cooperativista", asegura Todolí. "El negocio es quedarse con un porcentaje de la factura". Mientras, otras cooperativas de este tipo, ante la duda sembrada por el ministerio con Factoo han decidido cesar su actividad. Esta es la postura que ha tomado Cooperativa Online, quien cobraba 100 euros por asociarse.
"Me parece un acto de responsabilidad por parte de Factoo que se suspenda la actividad hasta que se aclare. La inspección de trabajo y la seguridad social dicen que es ilegal. No es prudente continuar", advierte.
Factoo: "Está abierto por ley"
Desde Factoo insisten en que están abiertos por ley. Así lo destacan nada más entrar en su página web, donde invitan a sus asociados a llamarles para aclararles las posibles dudas. Además, desde la compañía insisten en que según la normativa la descalificación del ministerio supondrá la liquidación de la cooperativa solo cuando exista una sentencia firme si se recurre a los tribunales.
Desde la cooperativa aseguran que ya han presentado los recursos pertinentes y que en el caso de no salir bien parados no se perjudicaría nadie y devolverían las cuotas a los asociados. "Factoo es muy solvente, ahora solo hay un problema de interpretación de la ley de cooperativas".
El informe emitido por la Inspección de Trabajo sobre Factoo, que cuenta con más de 17.000 asociados, concluye que la empresa comete varias infracciones. La principal es que Fidelis Factu "no realiza actividad cooperativizada alguna".
Además, el informe señala que los simulados "socios trabajadores" son, en general, profesionales trabajadores por cuenta propia dedicados a cualquier actividad, que actúan en el tráfico mercantil, por lo que se ven en la necesidad de emitir factura a sus clientes, y correlativamente, cumplir con las obligaciones fiscales y en el Régimen Especial de Trabajadores Autónomos (RETA).
Otra conducta infractora se refiere a que en los dos años que lleva activa ha tenido en alta a más de 5.000 afiliados distintos. Cada uno de los socios trabajadores se mantiene en alta durante escasos días, "lo que supone una vinculación anómala", destaca el Ministerio de Empleo. Los socios trabajadores de una cooperativa de trabajo asociado deben incorporarse en la prestación de trabajo a la misma con carácter, en principio, indefinido.