VALÈNCIA. El puesto de Secretario general del Ayuntamiento de Almussafes quedó vacante el 31 de diciembre de 2020 tras la jubilación de la funcionaria que ocupaba ese lugar. La intención del consistorio era convocar lo más pronto posible el concurso para que un nuevo funcionario ocupara su lugar de manera definitiva. De hecho, parecía que el proceso iba perfectamente encauzado, sin embargo, el baremo que se debería haber aprobado y publicado el pasado 10 de febrero, finalmente se anuló.
Se trata de una figura administrativa que corresponde a un puesto reservado a funcionarios de la Administración Local con habilitación de carácter nacional. Por lo tanto, gran parte de los méritos se establecen a nivel general y autonómico. No obstante, el ayuntamiento también puede establecer un baremo con algunos méritos específicos que, en el caso de Almussafes, contemplaban cursos especializados en materia de protección de datos de carácter personal y el nivel de valenciano.
Precisamente esta última cuestión es la que ha desembocado, finalmente, en la renuncia de la convocatoria. En el pleno ordinario del mes de enero, la administración local aprobó, con los votos a favor del equipo de gobierno y las abstenciones de la oposición, que el Grau Mitjà contara 0,25 puntos y el Grau Superior, 0,50. Sin embargo, un día antes de la fecha límite para publicar este baremo, el 9 de febrero, se convocó un pleno extraordinario de urgencia con un solo punto: modificar el baremo acordado solo unas semanas atrás.
Esta nueva propuesta, que salió de adelante con los votos a favor del equipo de gobierno que cuenta con mayoría absoluta, proponía dar un paso atrás en el grado de exigencia del nivel de valenciano. De este modo, el Grau Elemental supondría 0,25 puntos y el Grau Mitjà 0,50 puntos, mientras que el Grau Superior no sumaría nada para obtener el puesto. Este cambio de última hora no convenció a los regidores de la oposición, tres de Compromís y uno del Partido Popular, que votaron en contra.
De hecho, el único regidor del PP, Rafa Beltrán, llegó a presentar un recurso en el que solicitaba la anulación de este último acuerdo al considerar que el pleno se había convocado de manera irregular por no estar justificada su urgencia. Pero desde el departamento de Personal lo desestimaron, y fue entonces cuando Beltrán les advirtió de su intención de judicializar este desacuerdo presentado un recurso contencioso administrativo. Esta amenaza del edil popular finalmente llevó al ayuntamiento a renunciar a la convocatoria del concurso para el puesto de Secretario o Secretaria.
"Frente a esa amenaza el ayuntamiento ha decidido paralizar el proceso porque nos podemos ver en la situación de que si el contencioso tira para adelante, se paralice el concurso y nos quedemos sin secretario", ha explicado Davinia Calatayud, regidora de Personal. Así pues, esperarán a finales de este año cuando se volverá a convocar el concurso.
Para Beltrán se trata de "una mala gestión del gobierno" y deja caer que podría haber otros motivos para el cambio de última hora: "todo me hace pensar que, presuntamente, el puesto estaba pensado para una persona que no cumplía alguno de los requisitos", cuenta el regidor del PP. "No tenía ningún sentido el paso atrás en el nivel de valenciano que, además, ellos mismos habían exigido. Por eso presenté un recurso, porque era lo único que podría hacer par intentar paralizar algo que me parecía totalmente injusto", ha añadido Beltrán.
Por su parte, Calatayud asegura que no existe ninguna motivación detrás de este cambio en los méritos: "considerábamos que podíamos cambiarlo y lo hicimos, no hay ningún motivo". Pero en el pleno extraordinario sí que se argumentó el por qué de la rebaja en el nivel exigencia del valenciano. "Se estableció con un nivel excesivamente elevado, teniendo en cuenta que este ha de corresponderse con las funciones propias de la escala del puesto que se convoca […] por lo que el grado superior de valenciano establecido se estima que sobrepasa el nivel de exigencia razonable a que habilita la normativa reguladora de tales funciones", exponen.
Y, además, desvinculan la paralización del proceso de este paso atrás en la lengua: "el valenciano no es el quid de la cuestión, en ningún momento se ha paralizado el proceso por el tema de las bases, sino por el posible contencioso", señala la edil socialista. Los tres regidores de Compromís, pese a no presentar ningún recurso, también se mostraron contrarios a rebajar el nivel exigido de valenciano para el puesto de Secretario. En este sentido, en el pleno defendieron que en el ámbito administrativo había que otorgarle a la lengua "la importancia que tiene" y que los funcionarios debían tener un alto conocimiento de valenciano.