Foto: Pexels/ Mukhail NIlovVALÈNCIA (EFE). El Colegio de Economistas de València ha organizado este jueves la mesa redonda 'Inflación y Pacto de Rentas', en la que los participantes han abordado la "complejidad" de la lucha contra la escalada de precios y han lamentado la "falta de consenso" sobre un acuerdo de rentas.
La mesa redonda, presidida por el decano del Colegio de Economistas, Juan José Enríquez, ha contado con el profesor de Economía de la Universidad Católica de València Juan Sapena, el director general de Economía Sostenible de la Generalitat, José Vicente Soler, el vicepresidente de la Confederación de Empresarios de València (CEV València), Juan Pablo Tur, y el vicepresidente del sindicato CSIF Comunitat Valenciana, Rafael Cantó.
Enríquez ha recordado que en octubre la inflación se situó en el 7,3 % frente al 6,5 de diciembre de 2021, con una inflación subyacente del 6,2 y una previsión de cierre del 8,6 %, pero que bajará en los próximos dos años, con lo que se mantendrá sobre un 4,8 % en 2023 y 2024.
"Venimos arrastrando una crisis financiera que nos hizo adoptar unas políticas monetarias relajadas, que a consecuencia de la pandemia se tradujeron en una recesión cíclica", ha afirmado.
Para el director general de Economía Sostenible, José Vicente Soler, “venimos de un proceso de devaluación salarial indiscutible, donde hay que negociar la distribución de la renta de salarios y beneficios" puesto que, ha considerado, "la situación actual es un reflejo del oligopolio existente y de las dependencias que tiene España respecto a otros países”.
Asimismo, Soler ha destacado que la economía valenciana ha logrado recuperar el nivel económico previo a la pandemia “gracias a las políticas de la Generalitat Valenciana para hacerle frente a esta compleja situación”.
Por su parte, el vicepresidente del CSIF-CV, Rafael Cantó, ha indicado que el problema radica en que "en España no existe planificación en ningún ámbito de manera consciente".
Por ello, ha señalado, “se ha desmantelado el sector del carbón, las centrales nucleares, no se contemplan los cultivos y hemos abandonado el I+D que nos ha llevado a esta situación”.
Tur ha señalado que, aunque se hable de recuperación en la Comunitat Valenciana, "el sector primario ya no tiene la potencia de antaño, puesto que el sistema de minifundios no funciona, y el sector cerámico, que es uno de los más importantes de la Comunitat, se encuentra en una situación muy delicada".
Respecto al pacto de rentas, Soler ha afirmado que "el diálogo social es la solución a la inflación", porque “es la herramienta de materia de política económica para resolver problemas graves como la inflación que es el síntoma, no el problema”.
Sin embargo, ha considerado que “la dificultad está en ver cómo se reparten las cargas" y en ello "el ámbito de negociación colectiva es fundamental, porque el diálogo permite llegar a acuerdos en materia de pactos sociales”.
Para el representante del CSIF, Rafael Cantó, el Pacto de Rentas se está traduciendo en "actitudes demagógicas y en promoción política, más que en realidades".
Por su parte, Juan Pablo Tur ha afirmado que "no se puede ayudar a todos por igual; ni dos situaciones personales son iguales ni dos empresas tampoco".
"Al apostar por la igualdad en las medidas se está generando un importante desequilibrio donde se perjudica precisamente a las empresas y personas más necesitadas”, ha afirmado.
Por su parte, Sapena ha apostado por que, "para que de verdad sea efectivo el pacto de rentas", se bajen "los decibelios de crispación y también tener en cuenta a los autónomos porque parece que no los está teniendo nadie en cuenta”.
Desde CSIF, Cantó se ha mostrado reticente ante la posibilidad de llegar a un acuerdo: “Acabaremos en estos tres años con un 29,5 % de pérdida del poder adquisitivo, de manera que cuando llegue un ajuste los funcionarios no tendrán un convenio que aprobar”.
