VALÈNCIA (EP). El Ayuntamiento de València, a través del servicio de Jardinería Sostenible, ha aprobado el proyecto de creación de una mediana central ajardinada en la gran vía de Germanías para reducir la contaminación acústica. La iniciativa surgió de los presupuestos participativos 'DecidimVLC'.
Con esta actuación, se suprimirá un carril de circulación y, en su lugar, se situará una línea verde de 3,70 metros de ancho y 260 de largo. Al pasar de nuevo a ocho carriles, las emisiones sonoras bajarán un 11 por ciento, y con la vegetación el nivel acústico en las viviendas disminuirá un 20%, según ha indicado el consistorio en un comunicado.
La actuación también contempla la ampliación del paso de peatones entre las calles de Cádiz y Castelló y la creación de otro paralelo. En total, la intervención comprende 911 m2, tiene un presupuesto de 120.000 euros y un plazo de ejecución de mes y medio.
El vicealcalde y concejal de Ecología Urbana, Sergi Campillo, ha puesto en valor que la importancia del proyecto que, aunque es "complicado de tramitar, ayudará a mejorar el paisaje urbano, reducirá la contaminación acústica y la hará más parecida a la Gran Vía deseada y al bulevar verde que inicialmente tenía".
La nueva mediana suprimirá un carril de circulación y contendrá árboles, palmeras y vegetación arbustiva. Además, se creará un nuevo paso de peatones que conectará de manera más adecuada las dos partes de la Gran Vía.
Campillo ha apuntado que el proyecto ha tenido una "gran dificultad" en su tramitación administrativa por encontrarse también en la zona un refugio de la Guerra Civil, por lo que "ha sido necesario incorporar la observancia arqueológica patrimonial".
El edil ha resaltado que el proyecto "parte de una propuesta originada en un proceso de participación ciudadana": "El vecindario planteó la plantación de arbolado o una línea de palmeras en la mediana que separa ambos sentidos de circulación, con el fin de paliar la contaminación acústica y ambiental producida por el intenso uso del transporte público y privado".
En este sentido, el Ayuntamiento precisa que el Plan de Reforma Interior Parque Central establece la recuperación de los jardines centrales originales de las grandes vías, tal como permanecen en la contigua gran vía Marqués del Turia. En estos momentos, el túnel lo impide, ha puntualizado el edil, pero cuando desaparezca el paso inferior con la culminación del Parque Central, se podrá recuperar la reconfiguración histórica de la gran vía Germanías.
El proyecto aprobado ahora por el Ayuntamiento, que tiene carácter provisional para atender la petición vecinal hasta la ordenación definitiva, contempla asimismo ampliar el paso de peatones que conecta las calles Cádiz y Castellón, de cinco a ocho metros de anchura, y crear uno de nuevo paralelo, de ocho metros, al otro lado de las calles de Cádiz y Castellón. El objetivo es mejorar la comunicación entre las dos bandas de la vía.
"Los nueve carriles de circulación, con un ancho total de 28 metros, generan una barrera física casi infranqueable entre los dos lados de la gran vía y, pese a las grandes aceras laterales de 11 metros de anchura en cada lado, solo hay un reducido paso de peatones en el centro de los 380 metros de longitud de la calle", ha lamentado Campillo.
Los trabajos de mejora de las plataformas para peatones implicarán el desplazamiento de bancos y otro mobiliario urbano y una nueva instalación semafórica. La nueva infraestructura seguirá el trazado de los carriles de tráfico y contará con una superficie enjardinada de 675 m2. Dispondrá de arbolado alineado cada nueve metros y alternará perales de flor (Pyrus Calleryana) y olmos de agua (Zelcova Serrulata), que alejarán las olas acústicas de los pisos altos del entorno.
Asimismo, se plantarán bardisas bajas del género Pyracanha, de dos variedades, Coccinea, de fruto rojo, y Angustifolia, de fruto naranja, que retendrán las emisiones del rodamiento de los vehículos con el asfalto y proporcionarán colorido al conjunto. Habrá igualmente arbustos singulares ornamentales de cinco especies diferentes, los cuales contribuirán al filtrado sonoro. Los trabajos se completarán con la instalación de la red de riego.
La existencia de un refugio subterráneo en la Gran Vía Germanías ha hecho que el proyecto fuera "complejo", como ha admitido Campillo. De hecho, todas las acciones que afectan a este refugio, calificado como bien de relevancia local, serán supervisadas por especialistas en arqueología. En cualquier caso, habrá un acceso de mantenimiento permanente al refugio y se impermeabilizará previamente su zona de influencia.