Los consumidores se acostumbrarán cada vez más a la tecnología, lo que podría favorecer a las grandes compañías con presencia global
MADRID. Creo que de aquí a diez años lo normal será pagar de forma digital, y la gente te mirará de forma extraña si intentas pagar en efectivo.
Esta tendencia ha resultado especialmente evidente durante algunos años en los mercados emergentes, donde muchos consumidores no tenían una cuenta corriente pero sí tenían teléfono móvil y adoptaron la tecnología de pagos móviles con rapidez.
La pandemia ha acelerado el uso de los pagos digitales en todo el mundo, incluso en aquellos países en los que no estaban incorporados a la vida diaria. Creo que, cuando acabe la crisis, mucha más gente estará acostumbrada a realizar pagos digitales y es probable que no sientan la necesidad de utilizar tan a menudo el dinero en efectivo.
Los consumidores se acostumbrarán cada vez más a la tecnología, lo que podría favorecer a las grandes compañías con presencia global. También hemos asistido a un fuerte crecimiento de compañías más pequeñas situadas en países como Brasil que ofrecen plataformas de pagos móviles para comercios.
Jody Jonsson es gestora de Renta Variable de Capital GrouP