VALÈNCIA (EP). El Tesoro Público espera colocar este jueves entre 5.250 millones y 6.750 millones de euros en una subasta de bonos y obligaciones del Estado, la primera que celebrará en el mes de agosto, según los objetivos anunciados por el organismo dependiente del Ministerio de Economía.
En concreto, se emitirán bonos del Estado a 3 años, con cupón del 2,50%; obligaciones del Estado indexadas a la inflación y una vida residual de 3 años y 4 meses, con cupón 0,65%; obligaciones del Estado a 10 años, con cupón 3,45% y obligaciones del Estado con una vida residual de 20 años y 3 meses, con cupón del 5,15%.
Los tipos de referencia para esta subasta es del 3,073% para los bonos del Estado a 3 años; del 0,836% para las obligaciones del Estado indexadas a la inflación y una vida residual de 3 años y 4 meses y del 3,198% para las obligaciones del Estado a 10 años.
Esta subasta será, además, la primera que se celebrará tras la última reunión del Consejo de Gobierno del Banco Central Europeo (BCE), en la que se decidió mantener sin cambios los tipos de interés, de forma que la tasa de referencia para sus operaciones de refinanciación continúa en el 4,25%, la tasa de depósito en el 3,75% y la de la facilidad de préstamo al 4,50%.
En el mes de agosto, el Tesoro Público ha decidido no convocar la subasta de bonos y obligaciones del Estado que estaba prevista para el día 22. De esta forma, en el mes de agosto el Tesoro prevé convocar un total de tres subastas, como suele ser habitual cada año. En concreto, el día 1 se subastarán bonos y obligaciones del Estado; el 6, letras a 6 y 12 meses y el 13, letras a 3 y 9 meses.
En conjunto, la estrategia de financiación del Tesoro de 2024 prevé unas necesidades de financiación nueva de en torno a los 55.000 millones para este ejercicio, lo que supone una reducción 10.000 millones respecto a las de 2023.
Por su parte, la emisión bruta prevista ascenderá a 257.572 millones de euros, un 2% superior a la de 2023 debido al incremento de las amortizaciones, y el grueso se cubrirá mediante la emisión de instrumentos a medio y largo plazo con el objetivo de mantener la vida media de la cartera de deuda pública.
Dentro de la estrategia del Tesoro para 2024 está previsto recurrir nuevamente a las sindicaciones para la emisión de determinadas referencias de obligaciones del Estado.
Otros de los objetivos para 2024 será mantener la diversificación de la base inversora y apostar por la emisión de bonos verdes como elemento estructural del programa de financiación, reforzando de esta forma el mercado de finanzas sostenibles.