Prototipo de vivienda EscalàVALÈNCIA. La tradición no está reñida con la innovación y la tecnología. Todo lo contrario, es la base para mirar hacia un futuro que tiene en cuenta el planeta y el compromiso que la sociedad en su conjunto debe adoptar para vivir de una manera más eficiente y sostenible. Un uso de las tecnologías de vanguardia en la arquitectura para impulsar la transición hacia un futuro socialmente inclusivo y ecológicamente regenerativo. Una manera de entender la arquitectura que el grupo Azalea, de la Universitat Politècnica de València (UPV), ha puesto en valor con su último proyecto: Escalà, un prototipo de vivienda ambientada en El Cabanyal que compite este mes de junio en el Solar Decathlon Europe. “La vivienda sostenible es el presente, como lo está demostrando la emergencia climática, que requiere de una manera nueva de entender la arquitectura, más eficiente y respetuosa con el medioambiente”, comenta Martín Navarro, miembro del grupo Azalea.
Concretamente, el proyecto Escalà ha sido concebido pensando en el propio barrio de El Cabanyal y poner solución a una realidad: la gran cantidad de solares vacios que hay. Un barrio donde la vida se desarrolla en la calle, de ahí que esa filosofía de vida se extienda a la vivienda, que ha sido diseñada como un espacio diáfano en el que todas las estancias se adaptan a las necesidades de quienes la habitan. Martín explica que “la vivienda — de 71 metros cuadrados— está divida en dos plantas, en la que destacada la planta superior al ser una cubierta transitable”. En cuanto al patio, está fabricado con baldosas cerámicas tradicionales restantes de la industria que ayudan a drenar el agua —gracias al proyecto Life CerSuds—.
Como su nombre indica, la vivienda reinterpreta la escalà, la fórmula arquitectónica clásica valenciana que se perdió ya hace unos años: "era el espacio que se respetaba entre las barracas de El Cabanyal antiguamente para el mantenimiento de la cubierta y que contribuía a mejorar la ventilación cruzada, la iluminación y favorecía la creación de un microclima”. Asimismo, el grupo Azalea ha desarrollado un sistema que han llamado ‘El Caloret System’, un dispositivo que aprovecha la radiación solar diurna para calentar el aire que se utilizará para ventilar la vivienda de forma pasiva y “actuará como chimenea solar, aprovechando el calor acumulado para extraer el aire de la casa sin necesidad de ventilación activa”.
El prototipo, en el que destaca el uso de madera laminada, cuenta con un aislante que se ha fabricado con algodón reciclado y para su construcción se han empleado materiales de proximidad con el fin de “reducir la huella de carbono y fomentar la economía local”. Asimismo, también se ha tenido en cuenta todo el ciclo de vida del edificio pues “los materiales utilizados son fácilmente reciclables y pueden ser reutilizados en un futuro”.
Un prototipo de vivienda que representará a España en el Solar Decathlon Europe 21/22, que se celebrará del 10 al 26 de junio en Wuppertal (Alemania), la competición universitaria internacional más importante en el ámbito de la arquitectura y la ingeniería sostenible. De hecho, parte del equipo —son 35 en toral— ya se encuentra allí montando el prototipo que competirá contra otros diecisiete proyectos de universidades de toda Europa. “Aspiramos a ganar, por su puesto, pero estar allí por segundo año consecutivo y siendo el único proyecto español es ya toda una satisfacción”, comenta Martín resaltando que “con Escalà representamos la cultura valenciana y ponemos en el mapa nuestra forma de vivir y concebir el barrio”.
Y es que, no hay que olvidar que el equipo Azalea UPV fue premiado en el Solar Decathlon Europe 2019 por su diseño de casa eficiente abastecida únicamente por energía solar. Un prototipo de vivienda que obtuvo el primer premio en Arquitectura, el segundo en Eficiencia Energética y el tercero en Ingeniería y Construcción.
De todas maneras, este año ya tienen una victoria pues el proyecto ha sido escogido por los organizadores del certamen para analizar su viabilidad en la realidad. “El prototipo de vivienda se quedará tres allí y será objeto de investigaciones para ver si las opciones que hemos aportado son viables o no”, comenta emocionado Martín.
