¿Hacia dónde va el modelo industrial de la UE? Así es como Valencia le puede sacar partido

VALÈNCIA. La Unión Europea acaba de poner sobre la mesa los planes de futuro para el desarrollo de su industria y, como siempre, el presupuesto para desarrollar proyectos a través de la colaboración público-privada es inmenso. 120.000 millones de euros para innovación industrial donde la necesidad de crear una economía sostenible es de vital importancia. 

Hace unas semanas se hacía público el documento 'A vision for the European Industry until 2030' donde se recogen las futuras líneas de ayudas y financiación para avanzar en el camino. Ésta hoja de ruta se ha confeccionado con el asesoramiento de 20 expertos y Valencia ha estado en primera fila gracias a Avaesen, asociación valenciana de empresas energéticas. 

Su directora, Bianca Dragomir, ya ganó en 2016 el premio al mejor 'clúster manager' del año de la Unión Europea. Desde entonces, han ido encadenando proyectos con Europa que van desde Climate KIC a Parsec, la aceleradora de empresas impulsada en colaboración con la Agencia Espacial Europea. Y es que Avaesen ha sido una de las dos representantes españolas que ha trabajado en el documento junto al Gobierno Vasco. "Es un privilegio", explica la directora.

En esta estrategia, la innovación relacionada con la necesidad de preservar el medio ambiente -conocido como cleantech- cobra un protagonismo fundamental. China, por ejemplo, fue el mayor inversor en energías renovables del mundo el pasado año, con un 40% de la inversión. Con este escenario, Europa se plantea cómo no perder la competitividad global y ha decidido volcar una parte importante de recursos en ello.

Una estrategia de futuro

El tema no se considera una cuestión menor, ya que el grupo de expertos ha estado presidido por el vicepresidente de la Comisión Europea, Jyrki Katainen y su vicepresidenta ha sido Elzbieta Bienkowska, comisaria de mercado interior, industria, emprendimiento y pymes. "Si fue en Europa donde se inició la revolución industrial, aquí la tenemos que solucionar también porque se nos está yendo de las manos", reconoce Dragomir.

La industria tiene que formar parte de la transformación a nivel global, que va desde el cambio climático, a la movilidad, la inteligencia artificial o la impresión 3D. Ahora, más de 300 regiones en la Unión Europea podrán optar a estas ayudas y la Comunitat Valenciana lo tiene todo para competir, desde el capital humano a la industria o la materia prima.

Centros de experimentación

Una de las misiones de este nuevo enfoque es que administración pública e industria puedan hacer un 'pacto verde' y compartir riesgos para la experimentación de nuevas tecnologías que aporten una mayor sostenibilidad. En este marco, la Unión Europea planea en diferentes países unos centros de experimentación donde se irán testeando tecnologías disruptivas.

Un ejemplo son las propias smart cities, donde se integran desde la energía hasta el big data. "Se trata de coger un sector como agroalimentación, energía y medio ambiente, cruzarlos y ver qué pasa", señala Dragomir. "Esto va a tener mucho presupuesto  y Valencia tiene una oportunidad de oro para ser uno de esos centros, sobre todo con todo lo que está pasando con las aceleradoras y las incubadoras, pero sobre todo con tanto emprendimiento que hay aquí", asegura.

Además, apunta al escenario de colaboración, cada vez más frecuente, entre pequeñas y grandes empresas además de los centros de conocimiento, lo que beneficia a este modelo. "Se va a generar un fondo para la transformación industrial para dirigir estas iniciativas", señala. 

Una veintena de factorías de baterías eléctricas

Una de las grandes misiones de la Unión Europea es crear industria alrededor de las baterías eléctricas. "Van a generar unas 20 factorías en toda la Unión Europea. ¿Y por qué no en Valencia? Ya tenemos masa crítica en el sector de las energías renovables y la innovación", señala Dragomir. "Si España se veía como el país del impuesto al sol, ahora todo el mundo mira a Valencia como un hub de eco emprendimiento y de cleantech".

Europa tiene como objetivo reducir un 40% las emisiones de CO2 sobre los niveles de 1990. "La Unión Europea está siendo muy ambiciosa", asegura. En España también se ha marcado en un 42% de objetivo de reducción de emisiones. Eso sí, para llegar a los objetivos de las Naciones Unidas hay que ir seis veces más rápido en la lucha contra el cambio climático. "El reto es muy grande", recuerda. 

Dragomir apunta a un tsunami tecnológico y opina que en este entorno serán clave las redes de conexión de personas. De hecho, Avaesen ha sido ejemplo para los más de 2.500 clústers de la Unión Europea, de los que muchos adoptarán su modelo. "Tienen que hacer un salto impresionante para dejar de mirar hacia adentro porque hay muchos ecosistemas endogámicos. Deben de mirar como lo hacemos en València, donde todo el mundo se conecta de forma más abierta y más generosa, mirando por las sinergias", reconoce.

"En los próximos diez años, prácticamente todos los clústers europeos seguirán el modelo que hemos hecho aquí en Valencia y esto permite que nos miren como un polo de innovación", recalca. "Nosotros somos un clúster humilde, modesto y con pocos recursos pero que con ambición hemos llegado a liderar esto en Europa".

Parsec y el aprovechamiento de los datos

La Unión Europea también ha escogido a Avaesen para liderar la innovación intersectorial en energía, alimentación y medio ambiente de la aceleradora Parsec en colaboración con otros seis clúster europeos que dirigirán el proyecto en otros sectores. También participa el programa Copernicus de la Agencia Espacial Europea. La convocatoria se abrirá en septiembre y pretende utilizar la observación de los satélites y de los datos para obtener innovaciones disruptivas. 

"Utilizar big data para la gestión de los riegos, la predicción de los paneles fotovoltaicos, la prevención de los incendios o para actuar sobre la contaminación. No es lo mismo tener datos en tiempo real que tenerlos con 12 horas de antelación", apunta. "Esto es una oportunidad de oro para València porque tenemos mucha masa crítica en cleantech e innovación, pero también en big data e inteligencia artificial".

Este programa va a tener 2,5 millones de euros de ayudas directas a las empresas más innovadoras. "Hago una llamada a que las valencianas y las españolas se presenten porque creemos que hay un caldo de cultivo ya creado", apunta. Acelerarán en la primera fase 100 empresas que recibirán 10.000 euros cada una, mentoring y acceso a inversores. 

También elegirán a 15 consorcios que se beneficiaran de 100.000 euros cada uno. "Será a nivel europeo, pero lo lideraremos desde Valencia y por lo tanto también tenemos gran expectación de que se apunten muchas empresas de aquí", insiste. 

El regreso a la inversión en renovables

Sobre el gran incremento de inversión en renovables de los últimos años, Dragomir asegura que después del "invierno energético" se puede celebrar que las empresas se están animando. "Hay 1600 megavatios instalados en la Comunitat Valenciana, pero realmente hay 6000 megavatios en expedientes en tramitación en la Generalitat. Esto quiere decir que hay mucha demanda, se puede hablar de boom", reconoce.

Pero la directora de Avaesen asegura que la transición energética va de eso y ya vamos con retraso. "Hay una tarta muy grande y esto no ha hecho más que empezar". Dragomir niega una burbuja en energías renovables y apunta a la necesidad de esta explosión aunque sí recalca que debe darse una transición ordenada. Además, insiste en la importancia de avanzar en exportar la energía solar a otros países, donde España e Italia tendrían todas las condiciones para posicionarse.