VALÈNCIA (EP). El Consejo de Ministros ha aprobado este martes la rebaja del tipo del IVA aplicado en el recibo del gas natural del 21% al 5%, que estará en vigor entre los meses de octubre y diciembre, aunque el Gobierno no descarta la ampliación de la medida para el próximo año "si fuera necesario".
En rueda de prensa tras el Consejo de Ministros, la vicepresidenta tercera y ministra para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, Teresa Ribera, indicó que esta reducción, incluida dentro de un real decreto-ley y que se aplicará también a la compra de briquetas y pellets, tienen por objetivo "apoyar a los consumidores domésticos y a la industria frente a la crisis energética provocada por la tensión generada por Putin".
El Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico estimó que la aplicación de la medida durante estos próximos tres meses aportará un ahorro total, entre la rebaja del gas -190 millones de euros- y para estos sustitutivos ecológicos de unos 210 millones.
Este nuevo tipo del IVA del 5%, tipo mínimo autorizado por la legislación comunitaria, beneficiará a todos los suministros de gas natural, incluidos los destinados a las calderas de las comunidades de vecinos. Hasta el 31 de diciembre de 2022 se aplicará el tipo reducido a las entregas, importaciones y adquisiciones intracomunitarias de gas natural, facilitando el acceso a este suministro ante la llegada del invierno y proporcionando ese ahorro a los consumidores.
Además, la reducción impositiva también se aplicará a pellets, briquetas y leña, sustitutivos ecológicos del gas natural procedentes de biomasa y destinados a sistemas de calefacción, cuyos precios se han incrementado considerablemente con la cercanía del invierno. Proporcionará así ahorros para unos 19,4 millones a los consumidores, según estimaciones del Ministerio.
Con esta nueva medida el Gobierno busca reducir la factura de calefacción de los consumidores de cara a la llegada del otoño e invierno. Así, se iguala en el caso del recibo del gas natural la bajada fiscal que ya está aplicando en la factura de la luz.
El Ejecutivo ya ha rebajado en un 80% los impuestos vinculados con el recibo de la luz, lo que ha supuesto un ahorro para los contribuyentes de en torno a 10.000 millones de euros.
A este respecto, Ribera indicó que, tanto para el caso de la luz como del gas natural, el Gobierno "estará pendiente de cómo evolucionen las cosas" para la renovación de las medidas fiscales sobre los recibos de ambos consumos.
Asimismo, el Gobierno ha dado luz verde también a la excepción para que los productores de electricidad a partir de cogeneración puedan beneficiarse también de la denominada 'excepción ibérica'.
De esta manera, las plantas de cogeneración de la industria podrán renunciar temporalmente a su retribución regulada para entrar en el ámbito de aplicación del mecanismo ibérico, percibiendo así el ajuste que cobran las centrales térmicas de gas. Esta renuncia, temporal, podrá solicitarse mientras el mecanismo ibérico esté vigente.
Esta medida había sido pedida con insistencia por industrias como la cerámica, papelera o química, entre otras, que representan el 20% del PIB industrial y suman unas 600 instalaciones de cogeneración.
Además, la actual situación suponía una pérdida de eficiencia energética de la economía, ya que la energía que no produce la cogeneración es sustituida por otras soluciones técnicas -ciclos combinados y calderas de gas- que presentan un rendimiento energético global inferior.
El incremento de los costes del gas ha llegado a obligar a parar muchas instalaciones de cogeneración, que utiliza el calor de los procesos industriales para producir electricidad, debido a que no percibían el ajuste que cobran las centrales de gas con la aplicación del mecanismo ibérico; recibiendo solamente el precio de casación del mercado mayorista de la electricidad tras aplicar el mecanismo, que es mucho más bajo.
Ribera indicó que esta medida permitirá a la cogeneración "reflejar el coste del gas en sus cuentas" y que el parque de instalaciones "vuelva a funcionar con total normalidad".
Una central de cogeneración produce calor y electricidad a la vez de un modo más eficiente que si se genera calor por un lado y electricidad por otro, obteniendo un ahorro de energía primaria que ronda el 10%. Por lo tanto, la vuelta a la operación de las centrales de cogeneración paradas aportará un ahorro que puede alcanzar el 1,2% de la demanda diaria de gas en el mejor escenario, dijo Ribera.
Esta medida se añade a otras aprobadas previamente para apoyar a la industria electrointensiva y gasintensiva, como la exención del 80% en el pago de los peajes, la maximización de la compensación por el coste del CO2 repercutido en la electricidad, los avales públicos para la firma de contratos de suministro de energía a largo plazo o los pagos directos a las empresas. En conjunto, las ayudas suman más de 1.000 millones este 2022.
Además, el Ejecutivo ha aprobado un nuevo servicio de respuesta activa de la demanda aumentará la flexibilidad y la seguridad del sistema eléctrico, recuperando así un mecanismo de interrumpibilidad.
Con este mecanismo se prevé resolver, con la máxima eficacia técnica y el menor impacto medioambiental posible, las situaciones de desvíos importantes entre la generación y el consumo que se presenten en el periodo horario inmediatamente anterior al del suministro, o incluso en la propia hora de suministro.
El servicio podrá ser prestado por la demanda a cambio de ingresos económicos otorgados mediante subastas de periodicidad anual, tal y como sucedida con el antiguo sistema de interrumpibilidad.
Red Eléctrica, como operador del sistema, gestionará el nuevo servicio y lanzará la subasta anual, en la que podrán participar todas las unidades de demanda -comercializadoras y consumidores directos- mayores de 1 megavatios (MW).
La primera de las subastas se celebrará muy próximamente, porque el nuevo servicio debe estar operativo antes del próximo 1 de noviembre, con vistas a la temporada invernal.
Igualmente, la normativa aprobada por el Consejo de Ministros incluye otras medidas que facilitarán el crecimiento de la generación renovable. Así, se establecen nuevos criterios más flexibles para determinar la capacidad de las redes de transporte, que podrá variar en cuestión de meses, días y horas, respetando siempre los límites térmicos de la instalación.
También se agilizan y simplifican trámites administrativos para los proyectos de generación, como los relativos a la identificación de las empresas legal, económica y técnicamente capaces, o las consultas entre distintas administraciones públicas.