Stadler, de tantear el precio de salida a bolsa a rozar mínimos anuales en los últimos dos meses

VALÈNCIA. Las acciones de Stadler Rail (SRAIL) andan de capa caída en la bolsa suiza, tal y como se observa en el gráfico inferior de Yahoo Finance. Desde que el pasado 8 de mayo cerrasen en los 37,94 francos suizos (38,84 euros), a un paso de los 38 CHF a los que partieron en el parqué el 10 de abril de 2019, el fabricante ferroviario suizo ha ido perdiendo comba y ayer rozaba mínimos anuales dejándose en los dos últimos meses prácticamente un 12%.

"La revalorización del franco suizo frente al euro en las últimas semanas ha tenido que ver en la debilidad de Stadler en bolsa. La moneda helvética ha pasado de cotizar de 1,013 unidades/euro a superar la barrera de los 1,03 aunque desde ahí volvió a ceder terreno", explican desde una gestora de fondos de inversión consultada por este diario. "El pasado año tuvo un comportamiento bajista por dicho motivo, que pasó factura también sobre sus cuentas", añaden. Y no les falta razón, tal y como publicó Valencia Plaza a principios de 2023 bajo el titular 'Stadler 'descarriló' en bolsa el año pasado tras bajar casi un 18% y dejarse 712 millones de euros'.

Los títulos de compañía fundada en 1942 por Ernst Stadler han reducido su ganancia en lo que va de ejercicio en el parqué helvético hasta el 2,13%. Todo ello después de haber llegado a revalorizarse un 16,22%, tomando en cuenta los máximos de este 2023 situados en los 38,12 CHF el 16 de febrero. Precisamente un mes después, el 16 de marzo, tocaron los mínimos del ejercicio en curso (33,12 CHF) frente a los 33,50 CHF a los que despidió la sesión de ayer.

La subida anual de SRAIL en bolsa es la mitad que presenta el Swiss Market Index (SMI), es decir, principal índice de la Bolsa de Zúrich, con un 4,33%. Dicha mejora ha llevado a los títulos del gigante del sector ferroviario dirigido por Markus Bernsteiner a capitalizar 3.430 millones de euros al cambio. O lo que es lo mismo a situarse a la altura de Fluidra (3.425 millones) dentro del Ibex 35.

Mientras tanto la decena de analistas que siguen a SRAIL, según datos de MarketScreener, le tienen adjudicado un precio medio objetivo inferior al que cotizaba ayer a media sesión, es decir, 33,80 francos suizos. Concretamente ven a la helvética en los 33,61 CHF donde tres recomiendan 'comprar', cuatro 'mantener', dos 'infraponderar' y una 'vender'.

Pinchar aquí para ver el gráfico más grande. Fuente: YahooFinance

Mientras tanto Stadler ya ha comenzado a fabricar en el municipio valenciano de Albuixech las dos primeras unidades de los 79 trenes encargados por Renfe. Conviene recordar que se encuadran en la histórica inversión del operador español a la cotizada suiza, que alcanza un montante de 1.305 millones de euros. Precisamente ayer estuvo en dicha factoría el presidente de Renfe, Raül Blanco, para conocer los detalles del diseño de los trenes de gran capacidad de Cercanías.

Y siguiendo con los contratos, SRAIL se hacía hace unos días con otro en Italia, cuyas unidades también saldrán de la factoría valenciana. Concretamente para suministrar 25 tranvías de media capacidad -y otros tantos de alta capacidad, ambos de la clase Tramlink- a la empresa transalpina Azienda Transporti Milanesi (ATM) para que operen en Milán. La misma que en 2020 ya encargó otros 80 de idéntico modelo.

Potente cartera de pedidos

"Estamos muy orgullosos de que ATM vuelva a confiar en los tranvías de Stadler para mejorar y potenciar el transporte público en Milán", señalaba entonces Iñigo Parra, director general de Stadler Valencia. Añadiendo que "nuestros vehículos son una referencia en términos de prestaciones, fiabilidad, seguridad, accesibilidad universal, confort y tecnología punta. Estamos convencidos de que serán un éxito también aquí en Milán".

Una SRAIL que despidió 2022 en máximos históricos en lo que a su cartera de pedidos se refiere, que estaba valorada en 22.393,3 millones de euros al cambio, un 23,01% más respecto a 2021. Así se recogen en sus últimos resultados publicados -los correspondientes a 2022-, cuyo beneficio neto descendió un 44,16% hasta los 76,5 millones de euros. La apreciación del franco suizo y los daños colaterales provocados por la invasión rusa sobre Ucrania -por aquello del encarecimiento de las materias primas- tuvieron mucho que ver en la caída del beneficio.