MADRID (EP). Banco Sabadell ha incrementado el potencial de ACS en Bolsa, esperando ahora una revalorización del 10% del precio de sus acciones ante la inminente venta de su negocio industrial a la francesa Vinci por 5.200 millones de euros, un importe un 23% superior a la valoración de los activos realizada por la entidad. "Creemos que la confirmación de la venta servirá de catalizador, ya que vemos pocas opciones de que se revise el precio por debajo de nuestra valoración", asegura la entidad en un análisis en el que valora estos activos en 4.200 millones de euros.
Por ello, este catalizador podría permitir al valor disparar su cotización hasta los 29,8 euros por acción, frente a los 26,95 euros en los que cotiza actualmente. Desde el anuncio de esta operación, sus títulos se han revalorizado un 57% aunque pierden un 10% desde los máximos que registró en enero. En caso de cobro en efectivo por parte de Vinci, una opción que ACS ha dejado caer, Sabadell cree que aportaría una posición más ventajosa a la compañía en la medida en que le permitiría utilizar los fondos para realizar inversiones y evitar la volatilidad que generaría en las cuentas de ACS.
Con este ingreso, ACS podría incrementar el peso del negocio concesional, especialmente en autopistas; colaborar con Vinci en el desarrollo de 25 gigavatios (GW) de renovables, una alternativa que sugirió el presidente de la compañía, Florentino Pérez; incrementar la participación en su constructora alemana Hochtief; o excluir de cotización su filial australiana Cimic.
Pese a todo el abanico de posibilidades que abre esta operación y a la subida del precio objetivo realizada por Sabadell, la entidad también ha rebajado las estimaciones de resultados de la compañía para 2021 por el impacto de la venta del 50% de la minera Thiess, una transacción que también ha motivado una rebaja en su rating por parte de S&P Global Ratings.
Así, Sabadell estima ahora unas ventas de 35.685 millones de euros para este año, un 6,5% por debajo del pronóstico anterior, y un beneficio después de impuestos de 717 millones de euros, un importe un 12,2% inferior a las previsiones anteriores.