VALÈNCIA. Hace poco más de cinco meses, este diario informaba que Miguel Capdevila, el hombre fuerte de Bankia en València, asumía la territorial de Alicante y Murcia provisionalmente a la espera de la fusión -mejor dicho absorción- con Banco Mare Nostrum (BMN). Pues bien, las juntas de accionistas de ambas entidades daban ayer el 'sí quiero' y, según ha podido saber este diario, la entidad presidida por José Ignacio Goirigolzarri se plantea reorganizar las territoriales en la Comunitat Valenciana y Murcia.
Conviene recordar que actualmente son dos -València/Castellón y Alicante-Murcia-las territoriales por estos lares de las diez que tiene Bankia repartidas por toda España. El banco domiciliado en la capital levantina -por eso celebra aquí sus juntas pese a que un interviniente solicitó alternarlas con Madrid a lo que 'Goiri' dijo nones- busca hacerle un guiño a BMN y, por aquello de que su territorio natural es Murcia -por Cajamurcia-, está estudiando tal medida.
Además, en la reestructuración de hace cinco meses, Baleares -otra de las zonas de influencia de BMN por Sa Nostra- quedó bajo la tutela de la territorial catalana. De ahí que no sería de extrañar que 'pasara de manos' otra vez en otro proceso de reorganización territorial.
Todo ello mientras el proceso de desapalancamiento ha ido reduciendo oficinas y plantillas -sin contar todavía los 'daños colaterales' de esta fusión-, lo que ha ido mermando el número de zonas de las que cuelgan las territoriales. De media hay una veintena de zonas por cada territorial de Bankia en España. Así, la territorial de València/Castellón tiene 13, mientras que hay 6 en la de Alicante/Murcia, que a priori deberían incrementarse con la incorporación de BMN. Así se explica que entre la plantilla valenciana se barrunte que sobran zonas, tal y como lo ha constatado este diario de fuentes bien informadas.
De hecho, en el turno de intervenciones de la junta de Bankia de ayer participaron representantes sindicales reclamando una integración de plantillas no traumática, a lo que Goirigolzarri respondió que la creación "de este gran banco" llena el futuro de oportunidades de desarrollo profesional.
Y para ello echó mano de la meritocracia -del latín meritum o debida recompensa-, que utilizó en diversas ocasiones tanto durante como después del discurso. "La integración de BMN se guiará por estrictos criterios de meritocracia", repitió.
Sobre la adecuación del número de oficinas tras la integración de BMN, el primer ejecutivo de Bankia (BKIA) reconoció que tampoco se ha tomado ninguna decisión y que en los próximos meses se realizará un análisis y se iniciarán los contactos con los sindicatos buscando acuerdos para adoptar las decisiones correspondientes. Lo cierto es que todo está por decidir una vez aprobada la fusión por los accionistas de los dos bancos.
Una junta general extraordinaria, la de BKIA, donde apenas una decena de accionistas -la mayoría represententas sindicales- tomaron la palabra y de ahí que solo durase dos horas justas. O lo que es lo mismo: la más rápida de las siete celebradas superando en casi una hora a la que tuvo lugar en marzo pasado que ostentaba el récord. A las dos de la tarde los asistentes enfilaban la puerta bajo un ambiente muy calmado, sin duda el más de todas las que han tenido lugar. De hecho la presencia policial fue mínima -comparado con otras-, pese a que un accionistas intervino diciendo que "cuatro anillos de seguridad para entrar son muchos".
Los accionistas aprobaron la operación en una junta celebrada en el Palacio de Congresos de Valencia, que contó con la participación del 82,4% del capital social de la entidad y la presencia de unos 2.500 accionistas, en lo que supone el inicio de "una nueva etapa de crecimiento" tras "una transformación callada siendo fieles a nuestros valores y principios porque gracias a ellos estamos hoy aquí".
La fusión situará a Bankia como el cuarto banco de España con un aumento del 25% de la clientela y un crecimiento de la rentabilidad que supondrá, en los próximos tres años, un 16% más del beneficio por acción, propiciará elevar los ingresos del negocio y aportará 245 millones de beneficios adicionales.
"Queremos ser el mejor banco de España pese a que tenemos muy buenos competidores", señaló Goirigolzarri reconociendo que "nada hubiera sido posible sin la ayuda de los contribuyentes". De ahí que "tenemos que seguir creando valor para continuar devolviendo el dinero recibido y siempre con criterios de excelencia en el gobierno corporativo del banco", señalaba a modo de reflexión 'Goiri'.
"Cinco años después de la recapitalización, se ha aprobado una operación que es un hito muy importante, el inicio de una nueva era en la que también, además del crecimiento que supondrá la fusión, se trabajará en el crecimiento orgánico". recordaba. Asimismo afirmaba que se pretende crecer en los niveles de satisfacción de los clientes, lo que redundará en mejores cuotas de mercado, y en la penetración de productos de mayor valor añadido, todo ello "liberados de los corsés" que impone el plan de reestructuración -que termina este año- y "en pie de igualdad" con los competidores.
Sobre los trabajadores de BMN, que pasarán a formar parte del equipo de Bankia, aseguró que tendrán que realizar "cierto esfuerzo personal" que se verá "compensado" por nuevas oportunidades; mientras defendió el nombramiento del presidente de BMN, Carlos Egea, como consejero de Bankia, tras ser cuestionado por un interviniente, afirmando que "es un profesional de reconocido prestigio, con una exitosa carrera en el sector e idóneo para el cargo".
El presidente de Bankia dijo también que la operación se afronta sin necesidad de acudir al mercado, y que el FROB mantendrá una participación muy similar (67%) tras la fusión, ya que la participación es parecida en ambas entidades.
Será a partir de ahora cuando comience el pertinente proceso de solicitud y autorizaciones, que concluirá previsiblemente en diciembre, y después se iniciará la integración de los sistemas de las dos entidades, que acabará en el segundo trimestre del próximo año, según las previsiones de un Goirigolzarri que ayer vivió su junta más tranquila de las siete que ha presidido en València. Y de lejos.