El negocio de bp en España, al alza: alcanzó una facturación de 7.700 millones de euros en 2021

CASTELLÓ. Bp España, filial de la compañía energética y petrolera del mismo nombre, facturó durante 2021 más de 7.700 millones de euros entre sus diferentes ramas de negocio, la gran mayoría en concepto de ventas y unos 15 millones por prestación de otros servicios. Así, la matriz que aglutina las diferentes líneas de negocio de la marca bp, cerró el año con un beneficio neto de casi 129 millones de euros, tal como consta en las cuentas consolidadas del grupo en España.

La gran mayoría de los ingresos de la compañía proceden de su línea dedicada al refino de productos petrolíferos -algo que en España solo realiza en la refinería de Castellón- y la comercialización de hidrocarburos, con una facturación de más de casi 6.290 millones. El resto, corresponde a la venta de gas natural -1.311 millones-, lubricantes -57 millones- y otros productos y servicios -74 millones-.

Así, la compañía engloba, bajo la denominación bp España, las diferentes filiales, encargadas de diversas actividades, como bp Oil España, dedicada a la explotación industrial y comercial de crudo y de la que depende la refinería castellonense; pero también Markoil, que explota las estaciones de servicio; bp Gas Europe, para la venta de gas natural; y bp Solar España, centrada en la instalación de paneles solares. En total, el número medio de empleados durante 2021 fue de 2.256 trabajadores.

Venta de la rama de lubricantes

En los resultados del conglomerado referentes a 2021 ha tenido especial incidencia de la escisión de bp dedicada a la comercialización de lubricantes, Castrol España, y posterior venta de la misma. Una operación de casi 42 millones de euros que, a la postre, reportó a la matriz unos ingresos de más de 32 millones.

Así, entre sus líneas de negocio destaca el suministro de combustible. Y, sobre ello, la firma explica en sus cuentas que ostenta, en total, 784 estaciones de servicio repartidas por todo el país y que están operadas directamente por sus filiales "así como por otros agentes por medio de contratos de abanderamiento". Del total, 160 están gestionadas directamente por bp, con lo que son mayoría las franquiciadas.

2.000 millones más por el refino

Para poder establecer comparaciones con años anteriores, hay que centrarse en los resultados de la filial bp Energía España, que cambió su denominación anterior de bp Oil España para simbolizar la transición verde de reducción de la contaminación emprendida por la compañía. Dedicada en especial al refino de crudo en la refinería del polígono de El Serrallo y la comercialización de hidrocarburos, facturó más de 6.193 millones de euros, casi dos mil millones más -lo que supone un 47% más- que en 2020, cuando ingresó 4.211 millones.

Sobre la refinería radicada en Castellón, los resultados especifican que cuenta con una capacidad de procesamiento de crudo de 110.000 barriles al día, o lo que es lo mismo, 6 millones de toneladas en un año. La refinería "destaca por su fiabilidad y excelencia operativa", insisten las cuentas, dado que tiene "una disponibilidad de la planta superior al 97%", "una elevada eficiencia energética" y unos "costes operativos muy competitivos".

Todo ello, "la sitúa como la mejor refinería del grupo bp y una de las mejores refinerías del mundo", reiteran las cuentas -como cada año-, y se tradujo en 2021 en unos beneficios de más de 114,3 millones de euros, volviendo a los resultados positivos tras las pérdidas que registró esta filial de la compañía petrolera en España durante 2020, año marcado por la pandemia de coronavirus, que alcanzaron los 241 millones de euros.

En 2021, recuperación de precios

Este alza de los ingresos y la recuperación de los beneficios tiene una razón de base: durante el ejercicio 2021 la compañía vio cómo la actividad y los precios se recuperaban tras el año marcado por la pandemia y las restricciones de movilidad. Así lo dicen sus cuentas: "Ha recuperado prácticamente los niveles de precios previos a la aparición de la pandemia".

Concretamente, señala que durante ese año, los precios del crudo estuvieron muy vinculados a la evolución de la crisis sanitaria y la "recuperación ligera de la economía". Todo ello se reflejó en los precios del barril de Brent: pasó de estar por debajo de los 55 euros a principios de 2021 a superar los 70 al finalizarlo.