MADRID. Recientemente, antes de finalizar 2017, amanecimos con la información de que Ebro Foods mantendrá en los mismos niveles el plan retributivo en los 0,57 euros por título, lo que en principio son buenas noticias para los inversores, ya que cerró su cifra de negocios en 2017 algo más baja con respecto a su año anterior.
Nos encontramos un valor en el que los dos últimos años con cierta estabilidad moviéndose en el rango de los 18 euros y los 21 euros, lo que sumado al mantenimiento del plan retributivo, hace que sea un valor de los considerados estables a lo que debemos sumar el PER estando éste por debajo de la media del sector.
En el rango que comprende el año 2017 y su continuada lateralidad, nos enfrentamos a un valor con una cotización en la parte baja del canal, lo que puede servir como soporte y devolver al valor de nuevo a los máximos del año anterior.
No obstante, no debemos obviar la lateralidad de la acción y la ausencia de tendencia predominante, por lo que centraremos más la atención en el valor por la rentabilidad del dividendo que por otro motivo distinto.
Borja Matilla es analista de Hanseatic Brokerhouse