BENIDORM. La patronal hotelera de la Comunitat Valenciana, Hosbec, ha crecido en la última década ligada a una cara y forma de ser: la de Toni Mayor. El empresario de Benidorm anunció este viernes que en otoño dejará la presidencia tras 14 años en el cargo. Es hora de dar paso a nuevos candidatos y centrarse en Port Hotels, que ha ido expandiéndose últimamente por el resto de la Comunitat. Su decisión está tomada desde hace dos años, según dice a este diario, y se va después de años de lucha por mejorar el sector frente a quienes tienen el poder para cambiarlo. Eso sí, con un escenario mucho más favorecedor debido a la recuperación del turismo después de lo peor de la pandemia.
- ¿Cómo irá el verano, empieza a despegar el turismo como dicen?
Tenemos el handicap de los sobrecostes. Ha subido todo, ha habido un incremento de costes de más del 15 o 20%. Es lo que hay, lo está sufriendo toda la sociedad. Y la industria más que la sociedad porque por ejemplo de luz estamos pagando cuatro o cinco veces lo que en 2019. Hay hoteles que pagamos al mes 13.000 o 14.000 euros y ahora estamos en 60.000 euros. Es una barbaridad. Ha subido todo como a las familias.
- ¿La rentabilidad ha bajado entonces?
Yo creo que será un verano de un volumen muy parecido al 2019, pero creo que con una rentabilidad menor, con excepción de algún producto determinado como es el Asia Gardens o aquellos de más categoría que están funcionando mucho mejor que la media.
- ¿Tienen cuantificada de cuánto será la caída?
Aquí hay dos cosas que hay que tener en cuenta. La inflación que estamos teniendo se produce para todos. Después hay hoteles nuevos, que se han reformado en los dos últimos años, que están bien situados en el mercado, que arriesgan más y que tratan de tener un precio fluido sobre todo por los fines de semana o algunas fechas determinadas. Hay hoteles que sí que están haciendo una producción mayor que en el 2019.
"Los hoteles que están vendiéndose con más facilidad son los más caros"
Pero la media será que habrá una ocupación parecida pero con un coste mayor. La rentabilidad media creo que será menor que en el 2019 con toda seguridad. Los hoteles que están vendiéndose con más facilidad son los más caros. Estos han tenido dos años de un turista prestado: el turista nacional que no salió en el 2021 sobre todo y se vino a la costa. Y han fidelizado ese cliente, está volviendo a estos productos que son caros, como 400 euros al día. Son excepciones dentro de la costa.
- ¿Hay margen entonces para la subida de precios en hoteles?
Para el mercado británico hicimos los contratos el año pasado a unos precios muy parecidos al 2019, estábamos con covid y el año pasado no vino apenas ningún británico. Este año están viniendo pero con un contrato con unos precios que habíamos prefijado un año antes y por lo tanto estamos respetándolos. Esos clientes están viniendo con precios del 2019 con costes de 2022.
- Hace dos años se habló de que los fondos de inversión iban a entrar en Benidorm para aprovecharse de la situación y adquirir hoteles, ¿finalmente ocurrió?
Algo se ha hecho. El Palm Beach y el edificio Don Jorge, que era de Terra Mítica, se lo ha quedado un fondo de inversión para gestionarlo Pierre et Vacances. También los de Med Playa son cuatro o cinco hoteles que los lleva un fondo. El Selomar, el Villaitana... El H10 Porto Poniente lo ha comprado también un fondo aunque lo siguen operando ellos. Han hecho dinero, digamos que las compañías grandes lo que han hecho es hacer un poco de caja vendiendo productos quedándose la explotación y dando una rentabilidad al fondo y esto ha funcionado.
- ¿Cree que esta estrategia seguirá en los próximos años?
Ha venido para quedarse. Yo creo que, si no pasa nada, el turismo se ha demostrado como una industria muy seria y muy fiable y por tanto los fondos no ven ningún peligro en cuanto a una inversión en esa clases de productos. Sí que es verdad que aquí en Benidorm la gran mayoría son de familias y de gente de aquí o de hoteles muy establecidos ya y no… Bueno, podría haber uno como el caso del Palm Beach que sí que se ha vendido. Estaba a la venta, lo había ofrecido a muchos hoteleros de aquí, no lo han comprado y ha llegado el fondo y ha pagado el precio que pedían. El fondo es una especie de rapaz que se hace con todo lo que nadie quiere (ríe).
- ¿Cómo ve la llegada de marcas internacionales a Benidorm? ¿Es cierto que los empresarios locales lo ven con reticencias?
El problema con las marcas internacionales en Benidorm es que no hay. La concejala de Urbanismo dice que había terrenos y no sé qué. A día de hoy en Levante no hay ni un solar para hacer nada. Y en Poniente tampoco. El único era TM que quería desprenderse de una forma para hacer un solar hotelero, delante del Intempo.
"El fondo es una especie de rapaz que se hace con todo lo que nadie quiere"
Se habló de Riu en un momento, vino aquí y lo vio, era antes de la covid. Riu es una firma que está muy asociada a TUI, que es el mayor turoperador europeo que tienen Thompson, los ingleses, alemanes, etc. En aquel momento todos veíamos como una oportunidad de que una compañía como Riu aterrizara en Benidorm y aportara un valor añadido diferente al que ofrecemos los demás. Y eso nos vendría bien. Pero no han venido aquí. El único internacional que tenemos es Meliá, que tiene cuatro o cinco productos en la zona. Accor que ha venido ahora y Barceló con Asia Gardens, pero también con los dos de La Nucía.
- Entonces, ¿no es verdad que se vea con desconfianza desde los empresarios locales?
No, todo lo contrario, que venga quien quiera. Yo siempre he tenido una teoría sobre el tema del crecimiento de la planta hotelera. Es la teoría de Darwin sobre la evolución de la especie. Si viene y hacen un hotel magnífico y que aporta valor al destino como fue H10 por ejemplo o como ha sido ahora el Benilux o será el Primavera Park... Son hoteles nuevos que traen modernidad y confort, y hoteles contemporáneos. Bienvenidos sean. Todo lo que sea transformar la planta hotelera antigua en una de cuatro o cinco estrellas y que aporte más valor, es la regeneración que necesita la ciudad. Es buenísimo para el destino.
- Usted también se ha embarcado en reformas de sus hoteles, como la ampliación de Port Benidorm.
Sí, en San Juan abriremos el 29 de junio si no pasa nada, con más de 200 habitaciones. Será un hotel nuevo, muy bonito que va a quedar muy bien. El otro veremos la oportunidad cuando surja porque tenemos el problema de que la ampliación de un hotel es que se tiene que cerrar. Y ahora después de la pandemia yo creo que es prudente esperarnos unos dos o tres años para encontrar la oportunidad de poderlo hacer sin molestar mucho al cliente que tenemos dentro.
- También tiene un sueño en Poniente, con el hotel más alto de Benidorm. ¿Está aparcado?
Nosotros hicimos la urbanización de la calle, tenemos el solar dispuesto. Y el día que tengamos oportunidad y capacidad financiera para hacerlo, lo haremos. Digamos que es una reserva espiritual que tenemos ahí para el día de mañana hacer un hotel como Dios manda. Y hablarle de tú a tú al Intempo arquitectónicamente.
- Uno de las luchas de la patronal está en la tasa turística ¿cree que se aprobará?
Me da que no se va a aprobar. Ahora en otoño cuando la planteen en Les Corts, con las elecciones autonómicas a meses vista y si el domingo hay una debacle en Andalucía del PSOE, la tasa pasará a mejor vida. Será muy inoportuna políticamente. Aparte de innecesaria e injusta con el momento que se está viviendo y las circunstancias de la Comunitat. Y no puede ser que Andalucía, Murcia o las Islas Canarias no la tengan. Que València sí pero no Málaga, Sevilla San Sebastián o Madrid. Las ciudades que triunfan en España no tienen la tasa. Es injusto y pierdes competitividad. No tiene ningún sentido. Pondría la mano en el fuego de que eso no va a prosperar.
- No sé si es un ejercicio un poco complicado, pero ¿ve algo positivo en su implantación?
Lo único positivo que veo es que cobren algo a estos paraísos fiscales flotantes que se llaman cruceros (ríe), que no pagan IBI ni pagan nada. Si pagaran algo, algo quedaba. Crean mucha polución. Ciudades como Palma están acotando ya la capacidad de desembarco que puede haber en un día. Y hay ciudades donde si el crucero no sale del puerto, la gente puede hacer una o dos noches de estancias en la localidad. Prohíben el atraque en la ciudad de solo cuatro horas. Porque eso lo que hace es que ‘polucionan’ el destino, se meten 30.000 o 40.000 personas en un momento determinado cuatro o cinco horas en el municipio, y congestiona para nada.
- ¿Ha perjudicado al destino los cambios en el Ave de Madrid-Alicante?
Todo lo que sea complicar la vida al personal nos afecta a todas las industrias, sean turísticas o no. Creo que van a tirar marcha atrás, me da a mí por lo que estamos viendo en los últimos días. Esa política de querernos relegar a la estación de arriba... No entiendo el por qué de estas cosas. No tiene sentido cuando ha funcionado siempre y a ellos les ha funcionado también muy bien. Hay un tráfico importante. Técnicamente no tengo la información precisa del porqué de este Guadiana. Ahora aparezco, ahora desaparezco, ahora vuelvo a aparecer… Que crea incertidumbre y que no es buena para nadie.