Espacio de coworking de WayCo. Foto: EDUARDO MANZANAVALÈNCIA. El tirón del teletrabajo y la movilidad laboral han despertado nuevas necesidades en el mercado. Las empresas y los propios profesionales ya no requieren de un espacio de trabajo fijo, sino que en muchos casos ahora se busca algo diferente, cambiante y que en ocasiones 'inspire' y permita generar sinergías con perfiles afines. Y más para aquellos que tienen la posibilidad de emprender nuevos proyectos y realizar sus tareas fuera de sus países o ciudades de origen como los nómadas digitales.
Pero, también, son muchas las empresas que están eligiendo España, y concretamente València, para traer sus operativas y quieren zonas de trabajo, pero con flexibilidad en las rentas. De hecho, las numerosas noticias que sitúan al 'cap i casal' como una de las mejores ciudades a nivel mundial para vivir han favorecido un gran 'efecto llamada'. Y ello ha generado un gran dinamismo en la irrupción de nuevos modelos de oficinas y espacios de coworking en muchas plazas españolas, pero no siempre su oferta está disponible.
Bien lo sabe Alejandra Montánchez, quien de viaje laboral en Madrid buscó un espacio en el que desarrollar su actividad ese día, pero no lo tuvo sencillo. "No sabía dónde buscar y pensé: ¿cómo puede ser que se pueda reservar un hotel, pero no exista una plataforma en la que de forma ágil ver disponibilidad de espacios de trabajo?", señala. Y de aquella necesidad creó su propia empresa Findnfil, una plataforma estilo 'Airbnb' para reservar espacios de trabajo y conectar con profesionales afines.
Su modelo es bastante similar al de la conocida plataforma de alojamientos turísticos. Por un lado, los propietarios ofrecen puestos de trabajo con un precio concreto y el usuario hace una reserva del espacio que puede ser diaria, semanal o mensual y que se abona con una única factura. Para la diaria, se fija una hora de entrada y salida y se paga, mientras que para periodos más largos el abono es vía suscripción a través de una pasarela de pagos que se puede cancelar en cualquier momento.
Y es que la plataforma ofrece un amplio abanico de posibilidades: desde cafeterías, a hoteles hasta puestos en coworking. Incluso tiene algunas propuestas más singulares como una nave reconvertida en taller para artistas y próximamente incorporará un antiguo palacete. Findnfill tiene en su catálogo tanto oficinas completas, despachos individuales, espacios compartidos o salas de reuniones. "No nos importa tanto la localización, como los servicios que integran", recalca la CEO y fundadora de la firma.
Además, cada propietario decide a qué perfil va dirigido su espacio. La idea de Findnfill no es únicamente encontrar un sitio en el que desarrollar unas labores de trabajo, sino propiciar sinergías y colaboración entre profesionales de un mismo sector. Las únicas condiciones y requisitos que se exigen para ofertar un espacio es que esté amueblado y ofrezca agua, luz y wifi. "A partir de ahí, cuanto más azúcar, más dulce", señala.
Una fórmula que sirve para dar una rentabilidad a family office y fondos con activos inmobiliarios, a la vez que se da una solución a una demanda de mercado. "Existen muchos espacios que, además, cuentan con otros servicios y comodidades que se pueden explotar y que ofrecen una rentabilidad a sus dueños. Por ejemplo, hoteles que además de salas de reuniones también hacen packs con spa, piscina o catering. Pero también muchas cafeterías que con este modelo podemos llenar", indica Montánchez. Y, por la parte del usuario, FindnFill facilita cubrir un segmento y atender a una demanda cada vez más activa.
Con solo diez meses de vida, la plataforma cuenta ya con unos 50 espacios en València, Madrid y Barcelona y unos 1.000 usuarios diarios. Un crecimiento fruto de las necesidades que hay en el mercado y el déficit de oferta en ciudades como València, en donde no solo el ecosistema emprendedor va creciendo, sino también el interés de grandes corporaciones por aterrizar en la ciudad. Tanto es así que solo en los últimos meses, tecnológicas como Siemens Movility, Lutfhansa Technik, Hitachi o Toshiba han desembarcado en el 'cap i casal' con sus primeras delegaciones.
De hecho, los principales clientes de Findnfill son startups, nómadas digitales o empresas que buscan un hueco en la ciudad, pero que empiezan con pequeños equipos y requieren de pocos metros cuadrados. "Desde Findfill también ofrecemos asesoramiento personalizado en función de las necesidades. Muchas firmas necesitan flexibilidad porque llegan con pequeñas plantillas que van aumentando poco a poco. Nosotros les acompañamos en ese proceso y, si llegado el momento buscan superficies más grandes, les damos otras opciones en función de unas preferencias y un presupuesto. Queremos dar la libertad de que escojan un espacio, pero que sepan que siempre tienen la posibilidad de ser recolocados y cuentan con una alternativa si van creciendo", señala la CEO de la plataforma.
De cara a septiembre, la plataforma está trabajando con un inversor valenciano para poder ofrecer un nuevo servicio: la oficina corporativa flexible. "Ellos ofrecen el espacio y nosotros lo gestionamos a través de Findfill. El concepto será una oficina tradicional, pero con una condiciones flexibles, lejos de la rigidez de un contrato tradicional", avanza. Por el momento, este tipo de producto únicamente estará en el 'cap i casal', aunque la idea es abrir colaboraciones con propietarios de activos para ampliar cartera y aumentar servicios a sus usuarios.
Pero sus planes de crecimiento van más allá con la captación masiva de espacios y su penetración por todo el territorio nacional. La idea es alcanzar las 100 superficies y duplicar el número de usuarios diarios. Eso sí, sin perder su labor de asesoramiento para que las empresas sepan que cubren cualquier tipo de necesidad que precisen. "Queremos que el cliente utilice Findnfill como plataforma base de su trabajo para tener un espacio en cualquier parte del territorio nacional y que no sea solo una reserva puntual, si no que conf´en en nosotros.", concluye.
