VALÈNCIA. General de Alquiler de Maquinaria (GAM) está a menos de un 2% de entrar en el 'Top 10' de la bolsa española por rentabilidad en lo que va de año. La cotizada asturiana cerró el pasado viernes cayendo un 0,60%, lo que redujo su avance anual hasta el 46,49% para situarse en la undécima posición. Por delante tiene a tiro de piedra a Laboratorios Rovi (+48,28%) y la aceitera Deoleo (+48,38%).
La revalorización de GAM durante el presente ejercicio, que ha elevado su capitalización hasta los 158 millones de euros, la ha llevado a recuperar el 25,73% que se dejó en el parqué el pasado año. Todo ello sin bajistas con nombre y apellidos en su accionariado; y con un volumen de negocio ascendente -salvo en las últimas sesiones- para elevar la media diaria anual hasta los 75.829 títulos, según los datos de Infobolsa consultados por este diario.
GAM está controlada por la familia Riberas -como también la cotizada vasca Gestamp-, cuyo patriarca Francisco José Riberas traspasó hace un par de meses una participación conjunta del 15% de la compañía asturiana a sus hijos Mónica, Patricia y Francisco José, a razón de un 5% por cabeza. Entre toda la familia rondan el 60% del capital de la empresa tras incrementar su posición en la OPA que lanzaron en julio de 2019, que posteriormente redujeron ligeramente.
Una General de Alquiler de Maquinaria que publicó el pasado viernes sus resultados trimestrales tras el cierre de la jornada bursátil. La sociedad presidida por Pedro Luis Fernández redujo un 48% sus 'números rojos al perder dos millones de euros. Unas cuentas afectadas por las limitaciones y la ralentización del negocio de corto plazo, tal y como informó la compañía a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV). No obstante, considera que esto es algo coyuntural y estima que volverá a entrar en beneficios en pocos meses.
La cifra de negocio alcanzó los 36,5 millones de euros en el primer trimestre, lo que supone un incremento del 8% con respecto al mismo periodo del año anterior. GAM resaltó estos resultados enfatizando que se trata de algo "extraordinariamente positivo", ya que este año el entorno está "completamente afectado por la pandemia", mientras que entre enero y marzo de 2020 solo se observó un impacto en la última parte del mes de marzo.
El negocio de corto plazo facturó un 18%, con 15,5 millones. Dicho negocio se encuentra muy vinculado a la actividad económica general y es el que más ha sufrido la ralentización debido a las restricciones a la actividad, unidas a una muy mala climatología en el inicio del año. Sin embargo, la sociedad creció a doble dígito en los negocios de largo plazo (+20%), hasta 6,7 millones. Como también lo hizo en aquellos sin gasto de capital (+14,3%), hasta 14,3 millones, los cuales cuentan con menores márgenes que el alquiler tradicional, pero no necesitan apalancamiento adicional como son distribución, compraventa, mantenimiento o formación.
De su lado, el resultado bruto de explotación (Ebitda) se contrajo un 13% en el primer trimestre, hasta los 7,2 millones de euros. Asimismo, la posición de liquidez de GAM a cierre de marzo se situó en los 53,5 millones de euros, lo que le permitirá seguir aprovechando oportunidades de crecimiento, ya que -dados los ritmos actuales de vacunación-se espera que en breve se produzca una reactivación que favorezca el aumento de la actividad.
Finalmente el endeudamiento se situó en los 11,8 millones de euros, unos niveles "adecuados" para la empresa, que está diversificando sus fuentes de financiación, registrando en el Mercado Alternativo de Renta Fija (MARF) un programa de pagarés por importe máximo de 50 millones. De dicho programa ya ha realizado una primera emisión de 12,1 millones; además de lanzar otro de bonos por importe máximo de 80 millones de euros.
