ALICANTE. El Black Friday, tradición comercial importada de los Estados Unidos que se celebra el último viernes de noviembre (aunque en los últimos años se ha alargado hasta convertirse en una especie de 'semana negra' que se remata el lunes siguiente, cyber monday, con fuertes descuentos y ofertas), se ha convertido en una cita esencial para los comercios electrónicos, pero también para los físicos. Algunos ecommerces llegan a facturar en esta semana cerca de la mitad de sus ventas anuales. Y en consecuencia, la avalancha logística que provocan las ventas se ha convertido también en un potente motor para el empleo (temporal).
Sin embargo, las cifras de los últimos años parecen indicar que el efecto novedad se ha pasado entre los consumidores españoles, y las previsiones de contratación para 2023 son por primera vez en mucho tiempo peores que las del año precedente. Según un informe de la consultora de recursos humanos Randstad, el Black Friday y el Cyber Monday generarán alrededor de 910 contrataciones durante los diez primeros días de la campaña en la provincia de Alicante, un volumen que supondrá un descenso del 4,1% respecto a los 952 contratos que se firmaron el año pasado.
El caso de la provincia de Alicante no es aislado. También se producirán caídas en la creación de puestos de trabajo en las restantes provincias de la Comunitat Valenciana: Valencia (28%) y Castellón (1%), según Randstad. En el conjunto de la Comunitat Valenciana, el Black Friday y el Cyber Monday generarán unas 3.107 contrataciones, una cifra que representa un descenso del 19,3% en relación con los contratos firmados el año pasado. En España, las nuevas contrataciones ascenderán a 25.457 empleados, un 11,7% menos respecto a los 28.940 contratos que se firmaron el año pasado.
Estas cifras hacen referencia a firmas de nuevos contratos para el sector del comercio, la logística y el transporte para estas fechas. El black friday y el cyber monday se han convertido en los últimos años en hitos de consumo por sus ofertas y promociones (muchos consumidores aprovechan los descuentos para adelantar las compras de Navidad), lo que provoca que muchas empresas abran procesos de contratación. Las principales demandas de las logísticas para dar respuesta al repunte del consumo serán empaquetadores, carretilleros, mozos de almacén y transportistas, además de profesionales destinados a la atención al cliente.
El sector del comercio, por su parte, reforzará sus plantillas con dependientes, azafatos y perfiles comerciales, principalmente, entre los que se valora el trato cercano con el cliente y sus dotes comunicativas. Tanto para el sector logístico como para el relacionado con el retail, las empresas valoran cada vez más candidatos con competencias digitales y conocimiento de plataformas como consecuencia del incremento del comercio electrónico.
Hay varios factores que pueden explicar esta caída generalizada de la contratación en toda España. Por un lado, la última reforma laboral ha dado como resultado una menor flexibilidad para los contratos temporales. Por otro, el aumento de los costes de producción y de transporte, que han reducido los márgenes de las empresas, complican el lanzamiento de descuentos tan espectaculares como en años anteriores, lo que afecta también al comportamiento de la demanda. Y por último, los consumidores ya se han acostumbrado a esta promoción y el grado de interés ha decaído en los últimos años.
En este sentido, un reciente informe de la consultora alicantina Webpositer, especializada en marketing digital y posicionamiento en Google, indicaba que las búsquedas de los consumidores españoles relacionadas con el black friday durante el mes de noviembre se han reducido algo más de un 50% desde 2018, que podría considerarse el año en que esta tradición comercial tocó techo. El informe proporciona algunas interesantes conclusiones. Entre ellas, que el interés por el 'viernes negro' desciende de manera continua en los últimos años: de las 1.365.944 búsquedas en noviembre de 2018 a las 723.985 registradas en 2021.
El sector de la moda obtuvo el 35,58% de las búsquedas durante el Black Friday 2021, seguido de tecnología (25%) e hipermercados (23,07%). En 2022, la tecnología con un 29,73% de las búsquedas se alzó como triunfador de la campaña, según la tendencia registrada hasta la finalización del estudio. El 66,67% de las búsquedas (sin incluir marcas o producto) indicaban interés por las ofertas; frente a un 20,51% por la fecha de inicio de la promoción en España; y un 12,82% de consultas genéricas. Amazon es el sitio más buscado en estas fechas.
Esa caída del interés de los consumidores por la promoción del último viernes de noviembre puede estar relacionada también con la constatación, en los últimos ejercicios, de que muchos comercios inflan los precios de los productos más populares unas semanas antes, para luego aplicar el descuento. Es decir, que la rebaja no es tan alta como indican los porcentajes escritos en grandes cifras en negrita.
Cada año, Consumo investiga varias prácticas similares relacionadas con el black friday, y de hecho según un seguimiento elaborado por la app alicantina AZBox (sobre un total de 6.300 artículos) el 73% de los productos analizados experimentan una clara oscilación de precios al alza entre los días previos al Black Friday y su descenso en el momento de su celebración. Una práctica que se traduce en un incremento medio del 48% del precio de los productos, llegándose a recortar hasta la mitad en el día clave de la promoción.