VALÈNCIA. Las peticiones para la compra de vehículos eléctricos se disparan en la Comunitat Valenciana. El Instituto Valenciano de Competitividad Empresarial (Ivace), dependiente de la Conselleria de Economía, ha recibido en solo cuatro meses un total de 1.706 solicitudes para acceder a las ayudas de la tercera edición del Plan Moves para adquisición de coches sostenibles, casi las mismas que en toda la convocatoria anterior que duró un año.
Este Programa público de Incentivos a la Movilidad Eficiente y Sostenible (Moves) está destinado a actuaciones ligadas a la movilidad eléctrica que impulsen, por un lado, la adquisición de vehículos eléctricos enchufables y de pila de combustible, y, por el otro, la implantación de infraestructura de recarga de vehículos eléctricos. La Comunitat Valenciana cuenta con 30 millones de euros frente a los 10,5 millones de la pasada edición de 2020, unos fondos que gestiona el Ivace.
La convocatoria se abrió el pasado 29 de julio y, por el momento, ya se han recibido 1.706 solicitudes, según datos de la entidad que dirige Júlia Company. Esta cifra supone casi igualar a todas las peticiones recibidas en la segunda edición del plan, con vigencia del 30 de julio de 2020 hasta el 28 de junio de 2021, cuando se recibieron un total de 1.870 solicitudes. Un crecimiento que, según el Ivace, evidencia el interés por una movilidad más sostenible en la autonomía. Para estas solicitudes, el Ivace prevé destinar 6,8 millones de euros, esto es, un 22, 8% del presupuesto total, destacan desde Economía.
Los beneficiarios de este programa son particulares autónomos y entidades, pymes o gran empresa. La cuantía de las ayudas varía en función del tipo de vehículo adquirido y del solicitante y son los propios concesionarios adheridos a este programa los que se encargan de la tramitación para la obtención de las ayudas. Hasta la fecha, se han sumado a esta iniciativa cerca de 200 concesionarios de todo el territorio valenciano.
La mayor parte de las solicitudes recibidas hasta la fecha,748, corresponde a la compra de turismos eléctricos puros, a la que siguen 706 para la adquisición de turismos híbridos enchufables, 211 motocicletas eléctricas, 21 furgonetas eléctricas y 20 cuadriciclos eléctricos. Todas ellas permitirán un ahorro de energía de 158 toneladas equivalentes de petróleo al año, lo que supondrá dejar de emitir cada año 431 toneladas de CO2 a la atmósfera, subrayan desde el Ivace.
Por lo que se refiere al perfil de los solicitantes, la mayor parte son particulares. Así pues, de las 1.706 ayudas solicitadas hasta la fecha, 1.426 son de ciudadanos particulares, 242 corresponden a pymes, 21 a grandes empresas y 17 a entidades.
"El objetivo fundamental es incentivar la compra de vehículos que utilizan energías alternativas frente a las convencionales, especialmente los eléctricos para disminuir las emisiones de gases contaminantes, mejorar la calidad del aire, a la vez que supone un importante estímulo para el sector", señala el conseller de Economía, Rafa Climent, para quien el número de peticiones recibidas refleja "una mayor sensibilización hacia la necesidad de avanzar hacia una movilidad más sostenible".
Las cuantías de la subvención varían en función del tipo de vehículo, del solicitante y de si existe o no achatarramiento de un vehículo antiguo. Para los particulares, las ayudas para la compra de un vehículo eléctrico puro ascenderán hasta los 4.500 euros y 2.500 para los enchufables. En el caso de las motocicletas eléctricas, el incentivo puede llegar a los 1.300 euros con achatarramiento y de 1.100 euros sin mandar al desguace un vehículo.
Eso sí, el precio del vehículo eléctrico no puede exceder los 45.000 euros, a excepción de los modelos eléctricos de ocho o nueve plazas, los cuales podrán alcanzar los 53.000 euros. En el caso de las motos eléctricas, su precio no podrá sobrepasar los 10.000 euros. Asimismo, la compra de furgonetas eléctricas por parte de los profesionales autónomos se subvencionará con hasta 9.000 euros en caso de que el usuario achatarre su viejo vehículo y con hasta 7.000 en caso de que no lo haga.
Además, el programa Moves III proporciona ayudas de un 10% adicional a actuaciones en municipios de menos de 5.000 habitantes tanto para la instalación de infraestructuras de recarga en estos territorios como para la compra de vehículos por parte de personas que estén empadronadas en ellos. También, dota con un 10% extra la ayuda que reciben las personas con movilidad reducida.
Para el titular de Economía Sostenible, el fomento de la movilidad urbana sostenible pasa por "dar prioridad a los modos de transporte más limpios y eficientes y es indispensable impulsar la renovación del parque de vehículos que utiliza combustibles fósiles hacia aquellos que están propulsados con energías alternativas". No obstante, admite que el eléctrico todavía tiene ciertas dificultades para imponerse en el mercado respecto a los vehículos de tecnologías convencionales, por lo que ve necesario incorporar ayudas como el Plan Moves para animar la adquisición de este tipo de vehículos.