VALÈNCIA. La decisión de última hora del cabecilla de la Gürtel Francisco Correa de declarar, dentro de la pieza del caso Gürtel que investiga el presunto amaño de los contratos durante la visita del Papa, ha obligado a suspender el juicio durante 24 horas. El motivo ha sido que Correa padece una hernia inguinal que va a obligar a trasladar al preso al hospital.
Al decidir declarar, el tribunal se ha visto obligado a parar las sesiones, ya que no se puede alterar el calendario. El presidente ha dicho “creo que tiene una urgencia vital”. La sesiones se han suspendido durante la jornada de hoy y no se podrá poner una nueva fecha hasta que se le valore en el hospital, al que será trasladado de inmediato. El juicio se retomará mañana a las diez de la mañana, y si Correa no puede venir empezarán con la declaración de Cotino.