VALÈNCIA. A poco más de un año de que tengan lugar los próximos comicios autonómicos, los grupos parlamentarios de Les Corts ya hincan codos para conseguir sacar adelante la reforma de la ley electoral. Un compromiso que los partidos firmantes del Acuerdo del Botánico fijaron en el eje de Regeneración democrática del pacto, y que para hacerse realidad precisaba de una modificación de la norma valenciana "para hacerla más representativa y proporcional".
Superada la fase de comparecencias en comisión y con un dictamen en mano que recoge las conclusiones principales, PSPV, Compromís, Ciudadanos, Podemos y PPCV se reunieron -extraoficialmente- este jueves por primera vez tras las vacaciones navideñas para poner en común todas las cuestiones clave que extrajeron de las sesiones. La coalición valencianista fue la encargada de trasladar al resto de formaciones una propuesta marco que recogía los principales puntos que debería contemplar esta reforma. Una suerte de documento base sobre el que trabajar y tratar de llegar a acuerdos.
El texto recogía, según trasladan los grupos parlamentarios, 8 puntos clave y, a priori, tuvo buena acogida en los partidos, a excepción del PP. Aunque el clima fue cordial y de predisposición a alcanzar un posible consenso, desde este grupo parlamentario aseguraron a Valencia Plaza tras el encuentro, que tendrían que estudiar los matices porque no están de acuerdo con todos ellos. Así, uno de los artículos que más rechazo causa entre los populares sería la bajada de la barrera electoral al 3%, la piedra angular de esta reforma y que ha causado mayor división entre las cinco formaciones.
Compromís preferiría una circunscripción única (autonómica) pero eso exigiría una reforma del artículo 24 del Estatut -algo imposible ya en esta legislatura- con lo que se decanta por rebajar el 3% provincial, una posición en la que encuentra sintonía con Podemos. En cambio, el PSPV aceptaría una rebaja al 3% provincial "siempre y cuando en el conjunto de la Comunitat -autonómica- se obtenga ese mismo porcentaje". Es decir, apuestan por la doble barrera. Y Ciudadanos no quiere que se baje la barrera por provincias.
El PP, por su parte, siempre rechazó durante sus años de gobierno la posibilidad de rebajar el listón, más aún en el caso de acometerlo también por circunscripciones. ¿Sus motivos? Preservar la "necesaria estabilidad imprescindible para garantizar la gobernabilidad" e, históricamente, evitar la aparición del 'alicantonismo' -irrupción de fuerzas políticas solo con presencia en esa provincia-. Un argumento con el que los socialistas también coinciden.
El documento marco compartido este jueves también contempla otra de las tesis del dictamen que mayor revuelo causó, sobre todo, en PSPV y Compromís: la incompatibilidad de que un concejal sea, a su vez, diputado en Les Corts. Mientras Podemos y Ciudadanos estarían de acuerdo con que no haya duplicidad de cargos institucionales, en el seno de la formación socialista y valencianista existe división de posturas. De hecho, en el grupo parlamentario que lidera Fran Ferri, diputados como Jordi Juan -alcalde de Tavernes de la Valldigna- han discrepado con este planteamiento abiertamente.
El punto de partida sobre el que debatir, además, sostendría que las listas fueran desbloqueadas, con lo que los votantes podrían expresar su preferencia por unos u otros candidatos -a través de unas casillas que marcar mediante una X-. Y, por otra parte, para garantizar la paridad se propone aplicar la lista cremallera. Es decir, aquellas en las que, de forma alterna, se suceden hombres y mujeres. Un módulo que ya se aplica en otras comunidades autónomas.
Uno de los puntos que más consenso generó entre los cinco grupos, según trasladan fuentes presentes en esta reunión, fue la obligación de realizar debates electorales en la televisión pública valenciana. Así, de aprobarse este enunciado, À Punt retransmitiría en horario de máxima audiencia los oportunos "cara a cara" entre los candidatos de los distintos partidos a presidir la Generalitat.
Las primarias abiertas para incentivar la realización de procesos de selección, al menos de los candidatos o números uno de las listas, es otro de los anhelos que Compromís puso este jueves sobre la mesa. Así como que la ley contemple la posibilidad de que la Presidencia de la Generalitat pueda disolver Les Corts.
Por último, se plantea el envío de papeletas y publicidad de las distintas candidaturas por correo electrónico. Una propuesta que nace de la necesidad de reducir el impacto en el medioambiente y que, además, tendría un beneficio económico considerable para los partidos por la reducción de gastos que comportaría. La semana que viene, los grupos acordaron que volverán a reunirse y cada uno expondrá, si las hubiera, sus líneas rojas. La reforma de la ley electoral valenciana, no ha hecho más que comenzar.