MADRID (EFE). Las 'fintech' o empresas de finanzas tecnológicas dedicadas a la financiación participativa se consolidan en España como alternativa a los bancos, tras crecer su negocio un 67% este año, con una propuesta basada "en conectar al cliente" que está forzando al sector a cambiar.
"El ciudadano quiere tomar el control de sus ahorros y elegir dónde invertir", afirma a Efe el consejero delegado de la plataforma Lendix en España, Grégoire de Lestapis, que explica que estas compañías de financiación participativa o crowdlending funcionan como "herramienta" para prestar "de manera simple, con conocimiento y transparencia". La principal diferencia entre estas 'fintech', que gestionan servicios de préstamos entre particulares, y las vías de financiación tradicional, radica en "conectar" directamente a inversores y empresarios.
Más de veinte empresas de este tipo operan en España, de acuerdo con la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), lo que supone un 60% más que las registradas hace un año, y en total han sumado más de 100 millones de euros en 2017, un 67% más frente a los 60 millones del ejercicio anterior.
"Las 'fintech' se centran en el servicio al cliente", detalla De Lestapis, que señala asimismo que esta estrategia está "forzando a cambiar" de modelo a los bancos, al ofrecer mayor "rapidez" que el sector financiero tradicional, "sin carrera de obstáculos" para obtener la financiación y sin exigir garantía sobre el negocio. La razón de que estas compañías emergentes ya se hayan "posicionado" en el mercado nacional, continúa, es que su modelo "abierto" e "inclusivo" atrae a inversores particulares e institucionales, ya que hasta el Banco Europeo de Inversores (BEI) aportó 18,5 millones de euros al fondo de Lendix.
Con ello han conseguido "credibilidad" para estos nuevos actores, reconoce, aunque señala que aún es necesario un "cambio de mentalidad" del sector para expandir estos servicios. Las 'fintech' vienen a "complementar" las opciones en el mercado financiero, más que a competir con los bancos, asegura De Lestapis, que destaca que "se está desarrollando una colaboración" entre ambos, ya que la banca "se da cuenta de que debe poner al cliente en el centro".
Como "alternativa" de financiación para las pymes y el resto de empresas, estas compañías añaden además la posibilidad de formar carteras "diversificadas" a los inversores, con múltiples proyectos para realizar préstamos. Es el caso de Lendix, que opera a nivel continental, por lo que "un inversor puede prestar a empresas españolas, francesas o italianas", cita su consejero delegado.
En este primer año de funcionamiento en el mercado español, la plataforma ha financiado una veintena de operaciones por alrededor de 10 millones de euros, entre ellas la de la apertura del nuevo Hard Rock Café en Valencia, que se ha convertido en la operación de crowdlending más cuantiosa realizada en España. Asimismo, ha lanzado recientemente una aplicación para el móvil con el objetivo de "facilitar" los préstamos "en solo tres clicks" a sus más de 1.500 inversores españoles, y su meta es superar los 100 millones en financiación en 2019 en este mercado.
Según un estudio reciente de MyTripleA, uno de cada tres usuarios de internet a nivel nacional acude actualmente a servicios de empresas 'fintech', el doble que en 2015, y entre las más utilizadas están las que se dedican al crowdlending, para las que estiman un incremento del 100% en su uso en los próximos años.