VALÈNCIA. Los impulsores del proyecto hotelero de Convent Carmen ya tienen licencia para su reapertura. El Ayuntamiento de València ha dado luz verde a la licencia de intervención para habilitar el complejo histórico situado en la Plaza del Portal Nou al uso hotelero. Así, los propietarios ya podrán llevar a cabo las obras para acondicionar el Convento de los Padres Carmelitas -el Convento de San José y Santa Teresa- en un hotel de 44 habitaciones.
El proyecto hotelero, bajo el nombre de Calma Wellbeing, se implantará en uno de los dos espacios que constituyen el recinto religioso. El otro, la Iglesia y la zona de jardín, fueron en su momento un espacio sociocultural y de ocio que el Ayuntamiento de València ordenó cerrar en 2020 alegando incumplimientos de la normativa. Cierre que los propietarios consideraron "una tropelía y un ejercicio de violencia administrativa" y llevaron a los tribunales.
Ahora, la marca reabrirá como un espacio hotelero de 2.500 metros cuadrados. Permitirá la entrada a la Iglesia diáfana para dar paso a la zona del claustro, los patios norte y sur, el jardín trasero y una terraza. En la planta baja, además, se ubicará el comedor y la cocina y una zona de alojamiento con 14 habitaciones suite. En las plantas primera y segunda se ubicarán, en cada una de ellas, otras 15 habitaciones con baño integrado y office, y la planta cubierta se habilitará para aseos, almacén y una zona de uso para clientes.
Se instalarán dos ascensores con cerramiento de vidrio en el patio norte, junto a la zona de acceso. La licencia condiciona la reapertura a la reconstrucción de la marquesina de la luna del claustro conforme al proyecto original de Luis Gay con cobertura cerámica al tratarse de "un elemento de interés patrimonial", tal como recoge el permiso al que ha tenido acceso este diario.
La licencia ambiental, por otra parte, impide que el complejo disponga de amenización musical. Y "se deberá coordinar la recogida de residuos con la contrata municipal, siendo el propio establecimiento el encargado de depositar los contenedores en vía pública los días y horas acordados con la contrata municipal
Una vez finalizadas las obras, los dueños tendrán que entregar un certificado final de obra y de ruido, así como la documentación que acredita el cumplimiento del reglamento de alojamientos turísticos, y aquella relativa a la limpieza y desinfección.