VALÈNCIA. La ministra de Ciencia e Innovación y exalcaldesa de Gandia, Diana Morant, causó este jueves cierto malestar en las filas del PSPV-PSOE tras unas declaraciones pronunciadas durante un desayuno informativo organizado por Europa Press en Madrid.
Así, la dirigente socialista fue preguntada por posibles cambios en el Gobierno que apuntarían a ella para ser la próxima candidata socialista a la Alcaldía de la ciudad de València. La ministra se mostró "ajena" a las "especulaciones" sobre esta hipotética candidatura, aunque aseguró estar "a disposición" del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y del PSOE como así ha ocurrido "los últimos diez años".
Unas afirmaciones difundidas a través de teletipo de la agencia que provocaron cierto revuelo entre los socialistas valencianos al considerar que Morant dejaba así la puerta abierta a una posibilidad -la de ser candidata a la Alcaldía en la capital- que el propio presidente de la Generalitat, Ximo Puig, no contempla, según aseguran fuentes de su entorno.
En este sentido, todo apunta a la secretaria general del PSPV en la ciudad y vicealcaldesa de València, Sandra Gómez, como candidata a la vara de mando municipal. No obstante, en los últimos meses se viene agitando desde algunos sectores del partido rivales a la dirigente socialista la idea de que Puig debería buscar a otro aspirante para acometer la tarea de remontar la desventaja que se tiene frente al alcalde, Joan Ribó, de Compromís, y superar también al PP de María José Catalá.
Es más, en las últimas semanas algunos medios incluso de ámbito nacional han apuntado a la opción de que Morant, pese a ser natural de Gandia, pudiera aterrizar como candidata al Ayuntamiento de València en un momento dado. Una posibilidad en cierto modo extraña, no solo por el hecho de que la ministra no tenga un arraigo ni un manejo fluido de los asuntos de la capital, sino porque además, debería exponerse a unas primarias para ser cabeza de lista tal y como marcan los estatutos socialistas.
Por todo ello, que Morant no aprovechara la pregunta para cerrar el debate y autodescartarse como aspirante a la Alcaldía causó mayor sorpresa e incluso enfado en algunos casos dentro del PSPV. Bien es cierto que la agencia matizó posteriormente las declaraciones vertidas en el teletipo inicial, aunque el contenido de sus palabras no variaron sustancialmente, por lo que no resultó una intervención demasiado efectiva.
Para los no iniciados en política, la construcción "estar a disposición" de un presidente o del partido puede tener distintos significados. En ocasiones puede ser una frase inocua, pero en otros puede expresar una especie de silencio afirmativo; si bien atendiendo a la forma de expresarse de la ministra, las manifestaciones no parecían tener mayor intencionalidad. No obstante, el mayor ruido en las últimas semanas respecto a la Alcaldía de València parece provenir de Madrid y de un supuesto deseo de Ferraz de que exista otra candidata para el Cap i Casal, por lo que las palabras de Morant y que no se descartara públicamente se interpretaron en València como una forma de proseguir un debate que en las filas socialistas de la capital no se está produciendo.
Otras fuentes del PSPV consultadas por este diario, opinaron que había que entender las manifestaciones de Morant en un contexto de ámbito nacional. En las últimas semanas se ha llegado a plantear la posibilidad de una nueva crisis de gobierno por parte de Pedro Sánchez e incluso la ministra valenciana ha estado en las quinielas para ser relevada. Así, algunos consideran que Morant no está en los círculos más próximos al presidente del Gobierno y, al desconocer sus planes, utilizó la forma estándar para evitarse problemas, si bien acabó generándose otros.