VALÈNCIA. OHLA, conocida hasta julio de 2021 como OHL, encadenó ayer su tercera caída en bolsa pero venía de cinco sesiones al alza. Sin embargo, echando un vistazo atrás sus títulos tocaron mínimos históricos el pasado 24 de octubre, cuando echaron el cierre en los 0,3924 euros. Desde entonces iniciaron un rebote, que los llevaron hasta los 0,5085 euros el 23 de noviembre, es decir, prácticamente un 30% de recuperación. Sin embargo, ese día Millennium Capital Partners declaró una posición corta del 0,51% ante la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).
Se trata de un 'hedge fund' americano con pasado en cotizadas españolas como Enagás, Ence y Redeia, pero que a la hora de escribir estas líneas solo estaba presente en la constructora dirigida por los hermanos Amodio, que son los principales accionistas de la misma. Siempre hablando de una posición igual o superior al 0,50%, a partir del cual hay que desvelarla ante el organismo supervisor.
Desde el día que el fondo de cobertura neoyorquino anunció su 'corto' sobre OHLA, la cotización ha caído un 5,13% en el parqué español. De este modo, ha incrementado las pérdidas anuales hasta el 52,75%. O lo que es lo mismo: ser el tercer peor valor del ejercicio actual de todo el Mercado Continuo por detrás de Fluidra (-57,56%) y eDreams Odigeo (-57,42%). De ahí que la capitalización se haya reducido hasta los 285,16 millones de euros.
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Sin embargo, el consenso de analistas que siguen a la cotizada madrileña le tienen adjudicado un precio objetivo medio de 0,96 euros, el doble del cierre de ayer, según datos de MarketScreener. A solo cuatro céntimos de quitarse de encima la etiqueta de 'penny stock' -valor cuyos títulos valen menos de un euro-, que perdió el 18 de enero de 2022.
Por otro lado, los Amodio ven como las acciones se precipitan un 56,18% desde que entraran en el capital en mayo de 2020 tras comprarle el 25% del paquete que tenían sus fundadores, es decir, la familia Villar-Mir. Los mexicanos informaron el pasado 21 octubre que mantienen su compromiso con la reducción de la deuda, así como en cumplir su plan para mejorar su negocio operativo.
Todo ello después de esquivar la sanción de 21 millones de euros impuesta por la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) en julio de este año. Esta multaba formaba parte de una global de 203,6 millones interpuesta a las principales constructoras del país, Acciona, Dragados (ACS), FCC, Ferrovial, OHLA y Sacyr, por haber alterado durante 25 años miles de licitaciones públicas destinadas a la edificación y obra civil de infraestructuras.
Mientras tanto Goldman Sachs ha reducido su peso en el capital de la madrileña, al pasar de los 6,673% del pasado 25 de octubre hasta el 6,254% del 22 de noviembre. El banco de inversión estadounidense venía mermando su participación desde el 6,84% del 4 de octubre del ejercicio en curso.
Pese a la marcha bajista en bolsa, OHLA sigue ganando contratos en diferentes partes del planeta. Así, la semana pasada anunciaba que ha ganado tres nuevos en infraestructura vial y hospitalaria en la República Checa por 60 millones de euros. Hace un mes se hizo con la adjudicación de la ampliación del metro de Estocolmo por 85 millones, Asimismo, se hizo en octubre pasado, a través de su división Industrial, con el diseño, la construcción y la puesta en operación de cuatro plantas fotovoltaicas en España por un importe conjunto de más de 130 millones.
Una OHL que ha encontrado en la promoción de renovables un nuevo nicho de mercado, cuyo radio de acción abarca España, Chile y Colombia donde ha solicitado varios puntos de acceso y conexión a la red eléctrica de plantas solares fotovoltaicas con una capacidad instalada total de más de 300 megavatios (MW).
La compañía ya cuenta en su cartera con más de 25 proyectos de energía renovables, entre los ejecutados y los que se encuentran en construcción, en Europa, América y Oriente Medio, con una potencia total instalada de más de 1.200 MW, todo ellos como contratista. Sin embargo, ahora también quiere participar en el campo de las energías renovables como promotora de proyectos, con la solicitud para levantar varias plantas solares fotovoltaicas, que llevaría a cabo a través de su división de Industrial. Esta pata del negocio se encargaría de la promoción, la gestión, el diseño, la construcción, la explotación y el mantenimiento de las instalaciones renovables, con el objetivo de diversificar su actividad y mejor sus márgenes.
En Latinoamérica, OHLA -donde suma cerca de 530 MW construidos que dan servicio a una población equivalente aproximada de 100.000 personas- cuenta con el parque fotovoltaico La Jacinta Solar (con capacidad de 65 MW de potencia), situado en Uruguay; la planta fotovoltaica Perote II (120 MW), situada en México, así como con la instalación fotovoltaica La Huella (87 MW) y el parque eólico La Estrella (50MW), ambos en Chile. Por su parte, también en Chile construye la planta fotovoltaica Coya, de 200 MW. Otros proyectos llevados a cabo como contratista son la planta fotovoltaica de 20 MW en Tucson (Arizona, Estados Unidos), y las fotovoltaicas de Al Mafraq y Empire I, con 65 MW cada una de ellas y ubicadas en Jordania.