Ximo Puig. Foto: JORGE GIL/EPVALÈNCIA (EP). El president de la Generalitat, Ximo Puig, ha anunciado que a final de junio, el 55% de la población valenciana tendrá al menos una dosis de la vacuna contra el coronavirus y el 30% la pauta completa. Durante este mes se inocularán 1,3 millones de vacunas.
Así se ha pronunciado el president de la Generalitat durante la sesión de control, donde ha indicado que se renovarán 6.050 contratos Covid en sanidad por un total de 140 millones de euros, y que se contratarán 6.500 profesionales para refuerzos de verano.
Durante su intervención, Puig ha señalado que 1,7 millones de valencianos ya tienen al menos una dosis de la vacuna, y ha defendido que este esfuerzo en la vacunación ha situado a la autonomía en la "vía rápida" con "capacidad de encabezar y liderar el empleo en 2021". Para Puig, estamos en las "mejores condiciones de iniciar una recuperación sólida y fuerte".
Respecto al plan de verano, ha defendido que los 6.500 contratos van a permitir "atender de la mejor manera posible a la sociedad valenciana" para generar un espacio "de máximo estado del bienestar" y una "mejor capacidad para la creación de empleo".
Puig ha reprochado a la síndica 'popular', Eva Ortiz, que haya "descrito un hilo de fakes" y les ha espetado: "Les sabe muy mal, pero la Comunitat Valenciana está, incluso después de la pandemia, mejor ahora que cuando dejaron de gobernar". Además, ha asegurado que la economía valenciana "resistió mejor que la española" la crisis.
En el turno de preguntas, Eva Ortiz ha acusado a Puig de realizar "el mayor recorte en sanidad de la historia", de "desmantelar centros de urgencias" y "abusar de la incertidumbre" de los trabajadores. Por ello, le ha exigido que "mantenga a todos los profesionales sanitarios al menos mientras dure la pandemia".
También le ha instado a "reforzar personal en zonas turísticas, reducir listas de espera": "No entendemos cómo despide por la puerta de atrás al 40% de profesionales que hace dos minutos llamaba héroes"
Por otra parte, le ha instado a "ejercer de presidente" y "plantarse en Madrid" por el trasvase Tajo-Segura, y le ha instado a evitar que se publique el decreto que recorta la cantidad de agua, no a recurrirlo cuando salga.
Igualmente, le ha preguntado "¿Por qué la Abogacía no actúa igual para que su hermano y sus socios devuelvan el dinero defraudado?". Por ello, le ha reclamado que este estamento "no haga distinciones". También ha querido saber si la policía judicial ha registrado la sede de su hermano o alguna de las empresas de los socios.
Por su parte, la síndica de Ciudadanos, Ruth Merino, ha acusado al Consell de "espantar familias enteras hartas de sus políticas lingüísticas" y le ha acusado de preferir una Comunitat "dividida, hostil y cerrada antes que rica, abierta y unida".
Así, le ha acusado de "crear un problema en la calle donde no lo había" y ha agregado: "Queremos decidir qué tipo de educación y qué lengua queremos, sin coacciones, intromisiones ni chantajes". "No hay peor enemigo de una lengua que quien quiere imponerla", ha aseverado.
En su respuesta, Puig le ha espetado: "¿De verdad cree que la lengua común está en riesgo de desaparecer? ¿En serio? ¿De verdad?". "Si su percepción de la realidad es esa, tenemos un problema", ha manifestado.
Así, ha defendido que el valenciano "necesita impulso porque es la lengua que va en decrecimiento", y le ha preguntado: "¿El Estatut d'Autonomia es una imposición? ¿La Constitución Española es una imposición?". Para Puig, "lo que se está intentando hacer es garantizar los derechos" para que cada persona se pueda dirigir a la administración "en la lengua que quiera". "Las lenguas nunca son muros, son puentes", ha agregado.
Por su parte, la síndica de Vox, Ana Vega, ha reprochado a Puig que "imponga su agenda ideológica", y le ha afeado la aprobación de la ley de la función pública con un "requisito lingüístico que va a generar un auténtico éxodo de profesionales de nuestra comunidad".
Además, ha afeado "en vez de pensar en el futuro potenciando la excelencia, se instale en la mediocridad". "Mediocres pero que sepan catalán. Cuanto más aborregada esté la población, más tajada sacarán", ha manifestado.
Puig le ha respondido que la agenda del pueblo valenciano "es superar la pandemia y reactivar la economía", y le ha reprochado el "nivel de desprecio" que, a su juicio, utiliza para hablar del valenciano. "Creo que no nos lo merecemos", ha agregado.
