Saarlouis se moviliza contra Ford y la ministra del Sarre pone en duda el proceso: "No fue justo" 

VALÈNCIA. De la alegría de Almussafes a la desazón de Saarlouis. Finalmente, Ford ha escogido a la factoría valenciana para producir sus nuevos modelos eléctricos a partir de 2025. Una decisión que complica el futuro de la planta alemana porque solo fabrica el Focus, cuyo ciclo final de producción expira precisamente en tres años. Sin nueva carga de trabajo tiene difícil su supervivencia. Así se entendió desde el principio y, por ello, la batalla entre ambas instalaciones ha sido intensa durante estos meses. Y, tras la decisión de la multinacional, el malestar y la indignación han hecho estallar a los cerca de 5.000 trabajadores de Saarlouis.

De hecho, horas después de confirmarse Almussafes como la ubicación escogida, los sindicatos germanos convocaban una movilización en la fábrica contra la decisión. "Según nuestros expertos económicos Saarlouis era el claro vencedor. No aceptamos el resultado y nos sentimos traicionados por la dirección europea", aseguraba a los medios de comunicación, Markus Thal, presidente del comité de empresa de la planta.

Según recogen varios medios locales, la protesta ha obligado a cortar algunas carreteras, por lo que ha tenido que acudir la policía para desviar el tráfico. También se ha acercado hasta el lugar de la manifestación la ministra de la región del Sarre, Anke Rehlinger, para mostrar su apoyo a los trabajadores y criticar con dureza la elección de Ford.

"La decisión es una farsa"

Así, en su cuenta personal de Twitter, Rehlinger ponía en duda el proceso de elección de Ford que ha obligado a competir a ambas plantas. "Ford ha decidido y la decisión es una farsa. Estamos convencidos de que el grupo ha optado por la oferta económicamente más pobre", añade en un hilo creado en la citada red social.

Su gobierno había estado manteniendo reuniones hasta última hora con los directivos de la multinacional para intentar convencerles de la idoneidad y competitividad de su fábrica. Además, en el mes de mayo viajaron hasta EEUU para forzar su electrificación. Pero, pese a estos encuentros, Rehlinger asegura que tiene la impresión de que "el proceso nunca fue justo". "Ford ha enfrentado a las fuerzas laborales entre sí con esta guerra de ofertas lamentable", critica en alusión a la pugna que ha enfrentado a Saarlouis y Almussafes cerca de medio año para lograr la inversión. 

En cualquier caso, la ministra del Sarre ha intentado lanzar un mensaje de tranquilidad a la plantilla y a la industria de la automoción alemana. "Estamos luchando para asegurar tantos puestos de trabajo como sea posible después de 2025 y, al mismo tiempo, crear otros nuevos. La ubicación de Saarlouis es excelente y tendrá futuro, ya sea con o sin Ford", destaca.

"Nuevas oportunidades" para Saarlouis

Tras anunciar su decisión, el presidente de Ford Europa, Stuart Rowley, recordaba que en 2025 la planta alemana se quedará sin el Focus, el único modelo que fabrica, pero aseguraba que hay abierto un proceso para buscar "nuevas oportunidades" para la instalación. Sin embargo, admitía que, en la actualidad, no existe un plan industrial para dicha factoría más allá de esa fecha.

El directivo destacaba que Ford invertirá 2.000 millones de euros en sus operaciones en la factoría de Colonia para la producción de turismos eléctricos desde el año que viene y remarcaba el compromiso de la multinacional con Alemania. "Ford está invirtiendo mucho en las operaciones de fabricación de vehículos eléctricos en Alemania y estamos comprometidos con el país como nuestra sede central en Europa", incidía.