Gente haciendo cola en el Banco de España para comprar Letras. Foto: Carlos Luján / Europa PressVALÈNCIA. Otro revés en toda regla el que sufrieron ayer los pequeños ahorradores al ver cómo el Tesoro Público le pegaba un auténtico 'hachazo' a las nuevas Letras a doce meses. Concretamente recortó su rentabilidad marginal -el máximo que paga- desde el 3,630% de noviembre hasta el 3,327%. O lo que es lo mismo: mínimos desde el 3,247% de mayo pasado. Casi nada.
Se trata de un tipo de interés muy por debajo del que más ha pagado en las doce subastas de este año, que correspondió al 3,876% de octubre. Entonces, tal y como publicó este diario, eran junto con sus 'hermanas' del seis meses las más rentables de todo el Tesoro solo por debajo del 30 y 50 años.
Pero lo que es un hecho es que en las dos últimas subastas del año -solo se celebra una al mes-, el organismo dependiente del Ministerio de Asuntos Económicos y Transformación Digital ha cerrado la mano. Y, además, situándose a la par de la inflación, dado que el último IPC español -el de noviembre- fue del 3,32%.
Pero no solo eso sino que las Letras del Tesoro a doce meses han perdido claramente atractivo respecto a los fondos de inversión. En este sentido recordar lo que publicaba antes de ayer este diario: la rentabilidad media anual ponderada rozó el 5% a 30 de noviembre pasado, concretamente el 4,86%. O lo que es lo mismo: punto y medio porcentual por debajo de las Letras.
Por no hablar de que se alejan cada vez más del 4%, un nivel que superan los depósitos bancarios de hasta siete entidades financieras europeas. Todas ellas integradas en la plataforma Raisin, que ofrecen unos intereses bastante más generosos que la banca doméstica.
Al frente se mantiene la italiana Banca Sistema con el 4,30%. A continuación se sitúan su paisana Banca Progetto y el portugués BAI Europa con el 4,20%; seguidos del sueco Klarna Bank (4,16%), el estonio LHV Pank (4,15%) y el lituano Fjord Bank y la filial lusa Haitong Bank, que comparten el 4,10%.
