VALÈNCIA. Los comercios han dado forma a la ciudad de València. Los históricos han dado fe de su personalidad. En un momento en el que el comercio histórico tiene problemas para salir adelante, en el que su espacio está siendo ocupado por franquicias y los cierres se suceden, el Ayuntamiento de València tiene previsto lanzar un plan para corregir esa tendencia.
El plan se está trabajando con el gremio de la pequeña y mediana empresa y aspira a propiciar que aquellos comercios históricos de la ciudad que no tienen un heredero inmediato, a través de un proceso de tutorización de dos años, encuentren a personas que quieran hacerse cargo de su negocio y se lo queden. Y es que, salvo contadas excepciones, son mayoría las tiendas que deciden bajar la persiana ante la incapacidad de encontrar un relevo.
“A través de València Activa pondremos en común comercios tradicionales que van a cerrar con personas que quieran hacerse cargo de sus negocios y que estarán en una bolsa de trabajo”, explicó la teniente alcalde de València, Sandra Gómez. Así se evitaría el cierre de establecimientos históricos de la ciudad, una noticia que según dijo Gómez es de las nuevas económicas más dolorosas.
El procedimiento sería el siguiente: El propietario del local se dirigiría a la oficina de València Activa más cercana para informar de que tiene previsto cerrar. Entonces se activaría un protocolo que consistiría en buscar candidatos a seguir regentando el local, a quienes se pondría en contacto con la propiedad.
Tras un proceso de selección consensuado, el futuro propietario y el dueño original convivirían al frente de la tienda durante un plazo máximo de dos años, periodo que sería tutorizado por el Ayuntamiento. “Con ello se garantizaría”, dijo Gómez, “el traspaso del negocio y que así el comercio no desapareciera”.
Este plan se encuentra aún en fase de redacción y no existe una estimación aproximada sobre cuando se pondrá en marcha. El convenio modelo entre propietario y heredero ya está redactado y sólo falta que sea certificado por los servicios jurídicos. Tras ello seguirá un proceso burocrático que concluirá en el hemiciclo municipal.